Cuando llegó el Draft de 2001 todo mundo puso en duda que el egresado de Purdue, Drew Brees, fuera reclutado, pues su corta estatura era una limitante. El hoy líder en yardas por pase de la historia apenas mide 1.83 metros, y el promedio de su línea ofensiva es superior al 1.94 metros, por lo que siempre lanza de puntitas. Lo anterior no fue impedimento para que los Chargers lo hicieran su quarterback.
Algo era innegable, la inteligencia de Brees, y es que muchos especialistas lo catalogan como uno de los hombres con el mayor coeficiente intelectual en la NFL. Así que su estatura se pasó por alto a la hora de llamarlo el mejor futbol americano del planeta.
En 2005 pasó uno de los peores momentos de tida su carrera: sufrió una dislocación del hombro derecho, el de lanzar. Así que pensó lo peor, y entonces declaró: “Dislocarse el hombro de lanzar es lo peor que le puede pasar a un quarterback. Lo siguiente que pasó por mi mente fue que jamás usaría de nuevo el uniforme de los Chargers, es más, jamás me pondría otro jersey de la NFL”.
Aunque el destino le tenía otra jugada a Drew Cristopher Brees, y es que Mickey Loomis, gerente general en 2006 de Saints, y hoy vicepresidente ejecutivo de la franquicia, apostó por traer a un hombre de baja estatura, lesionados y corría muchos riesgos de no volver a un buen nivel.
Miami lo dejó ir
Los Dolphins vieron la oportunidad de tomar a Brees en la agencia libre, pues los Chargers lo liberaron por la llegada de Philip Rivers, y declinaron porque venía de una operación de alto riesgo para un pasador, así que hoy la historia en la bahía podría ser completamente diferente.
Comenzó la leyenda
Desde que se enfundó el jersey de New Orleans, en cada una de las 12 temporadas completas que tiene, superó las cuatro mil yardas, en cinco ocasiones superó las cinco mil, y en todas es el líder dentro y fuera del emparrillado del equipo.
El pasado Monday Night Football siempre será recordado como el día en el que Drew Brees rompió el récord de yardas por pase, y con eso confirmó que tiene un lugar entre la élite. Hasta Peyton Manning le dedicó un video un tanto chusco para felicitarlo.
El momento mágico
Drew Brees se paró en la bolsa de protección, pidió el ovoide, y luego de voltear hacia algunos de sus receptores, se decidió por Tre’Quan Smith para hacerle llegar el balón en pase de 62 yardas que acabó en touchdown, y así el pasador de Saints se convirtió en el hombre con más yardas en la historia de la NFL
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