Comer picante libera endorfinas, sustancias propias del cerebro que producen sensación de placer, sin embargo, en exceso puede provocar gastritis e incluso úlceras gástricas, aseguró el gastroenterólogo del IMSS, Héctor Gómez Jaramillo.
Entre los beneficios del chile, protege contra el colesterol, es rico en vitaminas A y C, además de ser eficaz contra las enfermedades reumáticas, ya que contiene una sustancia llamada capsaicina, que actúa como analgésico y antiinflamatorio, compartió el especialista del Hospital General Regional No 1., en Cuernavaca, Morelos.
Pero su principal aporte radica en que aumenta los niveles de serototnina en el cerebro, de manera que mientras más picante sea, mejor será la sensación de bienestar que causa. Otra de sus ventajas, señaló, es que puede prevenir problemas cardíacos, como infartos y derrames cerebrales causados por la presión arterial alta, estimula el metabolismo y es bajo en calorías.
Por otra parte, el consumo inmoderado de picante puede dañar órganos como el recto y el intestino grueso, al provocar irritación, diarrea, inflación y dolor intenso. Cuando se acaba el estímulo del pimiento, detalló, el intestino comienza una etapa de regeneración, momento adecuado para moderar el consumo de irritantes.
El picante contiene una sustancia llamada capsaicina, componente activo de los pimientos picantes y que causa la sensación de ardor en la boca. México es el segundo productor de chiles en el mundo, al dedicar 140 mil hectáreas de cultivo a este fruto, de acuerdo con la SAGARPA. Las principales variedades que se cultivan son el jalapeño, serrano, poblano, morrón y habanero.
LEG