Baltazar Castro Blanco, padre de Carlos Castro Olivas, quien es buscado por entregar colchones podridos a damnificados, ofreció una conferencia de prensa donde admitió que su hijo cometió un error al realizar la compra de la mercancía para regalarla a los afectados de las inundaciones de la Depresión Tropical 19-E.
El propietario de la empresa Serdi, expuso que metería las manos al fuego por su hijo, quien aseguró que está formado con valores, por lo que resulta improbable que se haya asociado a una empresa para sacar ganancias con la fabricación de colchones.
También afirmó que al igual que el Gobierno del Estado de Sinaloa, su hijo, quien es coordinador administrativo de la Sedesol estatal, también es víctima de la empresa fabricante que está ubicada en Guadalajara.
Los colchones venían empaquetados, por lo que no se detectó a tiempo que venían en mal estado.
El empresario dijo que acudió ante los medios de comunicación porque en redes sociales se percató que su nombre estaba siendo involucrado en el incidente. Finalmente, pidió al gobierno estatal que no tome “el toro por los cuernos” y emprenda acciones legales contra el proveedor.
Con información de medios.
ncg