Calificaciones, en riesgo por exportación
Dejar de exportar petróleo, como lo propone el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, tendrá implicaciones negativas para la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) y para la calidad crediticia del Gobierno, advirtió la calificadora de riesgos Moody’s.
Esto, precisó, debido a que el flujo de efectivo de la petrolera seguiría a la baja y, ademas, sería más volátil bajo el nuevo modelo de negocio que propone el próximo Gobierno, el cual estaría enfocado en la refinación de hidrocarburos.
“Pemex quedaría expuesta a mayor volatilidad de tipo de cambio, ya que sus ingresos por la venta de gasolinas serían en pesos mexicanos, mientras que 87% de su deuda por 104 mil millones de dólares a junio de 2018, está denominada en dólares estadounidenses y otras monedas duras”, precisó Nymia Almeida, senior vice president de Moody’s.
“Este nuevo plan también pudiera forzar a Pemex a importar crudo, situación que sumaría todavía más a los riesgos cambiarios y de flujo de efectivo”, precisó.
La calidad crediticia de la petrolera se debilitaría, dependiendo de cuánto crudo necesitara importar para alimentar su capacidad de refinación. De acuerdo con Moody’s, el riesgo de que Pemex registre un menor flujo de efectivo operativo en los próximos tres años, es aún mayor considerando la tendencia al alza de los precios del crudo y la intención anunciada por el nuevo Gobierno de no aumentar los precios locales de la gasolina.
Aunque el Gobierno federal ha disminuido su dependencia en los ingresos petroleros a partir de la reforma fiscal de 2013, la pérdida de los ingresos por este concepto para un Pemex que reporta pérdidas, podría ampliar considerablemente el déficit fiscal de México. Los planes de parar las exportaciones de petróleo privarían al Gobierno de ingresos por casi 2% del PIB, con lo cual se vería forzado a aumentar impuestos o a renunciar a su compromiso de disciplina fiscal.
LEG