La tensión en la frontera sur del país podría prolongarse a lo largo de las siguientes semanas y, muy probablemente se convertirá un “foco rojo” para la próxima administración federal, aseguró Juan Roberto Reyes Solís, coordinador del programa de Relaciones Internacionales de la Universidad del Valle de México.
Sin embargo, agregó que la respuesta que ha dado el Gobierno mexicano al caravana de migrantes que ha llegado a la frontera sur del país, proveniente de Honduras, ha sido la adecuada y apegada al reconocimiento de la migración como un derecho humano.
Ante ello, consideró el experto en temas internacionales, lo deseable es que los Gobiernos de México y Estados Unidos (país al que buscan llegar los migrantes) den continuidad a las acciones implementadas.
Hasta el momento, continuó, puede considerarse que la postura del Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, es complaciente con la antiinmigrante estadounidense, pues ha dicho que dará visas de trabajo a los migrantes para que laboren en México, lo cual podría interpretarse como un intento por contener la migración hacia el territorio de la Unión Americana.
“Da una señal de mantener en buenos términos la relación bilateral, es complejo, pero de hacerlo así (dar visas de trabajo), también generará un gran debate en México por las circunstancias del empleo que conocemos”, manifestó Reyes Solís.
Sobre la intención de generar e impulsar proyectos de desarrollo regional como vía para motivar la permanencia de los ciudadanos en sus países, el experto recordó que ya antes se había intentado con otras administraciones en México, pero no por ello habría que restarle posibilidades de éxito en esta ocasión.
LEG