La canciller alemana, Angela Merkel, anunció hoy la suspensión de la venta de armas a Arabia Saudí porque no puede hacerse en las actuales circunstancias, en referencia a la muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi, de quien no se tiene noticia desde el pasado día 2.
“En lo que respecta a las exportaciones de armas, estas no pueden tener lugar en el momento en que estamos”, dijo Merkel en Berlín tras una reunión con responsables de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU).
Merkel antes había reiterado la condena a la muerte de Khashoggi que ya había expresado antes en un comunicado conjunto con el ministro de Exteriores, el socialdemócrata Heiko Maas.
La canciller alemana subrayó, además, que las explicaciones dadas hasta ahora por Riad no son suficientes y dijo que Berlín procurará coordinarse con sus socios para asumir una posición común ante el Gobierno saudí.
En el comunicado conjunto con Maas, Merkel había condenado “de la manera más tajante” la muerte de Khashoggi, ocurrida en el consulado de su país en Turquía, adonde el día 2 entró a resolver unos trámites.
“Condenamos el hecho de la manera más tajante. Esperamos transparencia de parte de Arabia Saudí con respecto a las circunstancias de la muerte. Los responsables tienen que ser llamados a rendir cuentas”, se indica en el comunicado.
Maas, además, dijo en declaraciones a la Primera Cadena de la Televisión Alemana (ARD) que tras la muerte de Khashoggi no hay base alguna para aprobar futuras exportaciones de armas a Arabia Saudí.
“No hay de momento una base que permita aprobar exportaciones de armas a Arabia Saudí”, dijo Maas.
En los últimos meses ha habido críticas al Gobierno alemán por haber aprobado el envío de material militar a Arabia Saudí.
La aprobación de exportaciones de armas no depende de Exteriores sino del Ministerio de Economía.
No obstante, Maas dijo que “en comparación con las solicitudes que ha habido, las ventas de armas aprobadas han sido pocas”.
Maas ha cancelado su participación en un congreso económico en Riad y dijo que tiene una “gran comprensión” hacia todos aquellos que se niegan a viajar actualmente a Arabia Saudí.
Varios empresarios alemanes han cancelado también su participación en ese congreso, lo que sin embargo todavía no ha hecho el presidente de la multinacional Siemens, Joe Kaeser, lo que le ha valido algunas críticas.
Deslindan al príncipe
El ministro de Exteriores de Arabia Saudita, Adel Al Jubeir, tachó la muerte del periodista Jamal Khashoggi en su consulado en Estambul como “un terrible error”, pero insistió en deslindar a su Gobierno y que siguen investigando lo sucedido.
“Les aseguro que los responsables pagarán por ello”, agregó el canciller en una entrevista exclusiva en la cadena Fox, dando el pésame a los familiares de Khashoggi.
Calificó el asesinato del periodista como una “operación encubierta” y una “aberración”, y negó que el príncipe heredero, Mohamed bin Salman, hubiera estado involucrado de algún modo o fuera conocedor de ello.
El mensaje de Al Jubeir llega en medio del aumento de la presión internacional contra Arabia Saudita para obtener más respuestas del asesinato de Khashoggidespués de que Riad cambiara su versión y reconociera que el periodista había muerto en su consulado.
Además, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció ayer que el próximo martes revelará “detalles” sobre la investigación turca del supuesto asesinato de Khashoggi.
aarl