La situación en Miami está un tanto enrarecida, y es que después de comenzar la temporada regular con tres triunfos consecutivos, después cayeron dos veces en fila, y después superaron a los Bears, para posteriormente sucumbir contra los Lions. Luego de siete jornadas de la campaña regular, el equipo de la bahía deberá medirse a unos Texans que tampoco pasan por su mejor momento.
La franquicia de Houston suma cuatro victorias seguidas, luego de arrancar el año con tres derrotas, parece que ya encontraron la versión de Deshaun Watson que tuvieron el año pasado antes de que se lesionara.
De los últimos cinco enfrentamientos entre ambos, Miami venció en el último, pero los Texans ganaron los cuatro previos, y la serie total la ganan los de Texas por 7-1.
El mejor jugador defensivo de los Dolphins es Kiko Alonso, linebacker que lidera al equipo con 66 tacleadas 46 sólo), y ya le robó dos balones a los quarterbacks rivales, en una buena temporada para él, pero el egresado de Oregon está acostumbrado a tener mejores números, aunque las ofensivos ráídas y agresivas como la de Texans, se le dan bien.
El mayor reto para los delfines estará en frenar a DeAndre Hopkins, receptor que ya lleva 47 pases atrapados, 707 yardas, y cuatro touchdowns. Lo más peligroso del 10 de Texans es su altura combinada con su velocidad, por lo que Xavien Howard, el mejor esquinero de Miami, tiene que dar uno de sus mejores partidos en su tercer año como jugador de la NFL.
El ataque terrestre de ambos no es precisamente de lo mejor en la Liga, aunque Lamar Miller por Texans, y Frank Gore por Miami, tienen buenos argumentos para generar buena cantidad de yardas en las primeras oportunidades, y permitir a sus pasadores que tengan algo más de tiempo para encontrar a sus receptores.
Los apostadores en Las Vegas dan como favoritos a los Tecans por 7.5 puntos, aunque a Miami le urge una victoria para no alejarse de los líderes Patriots, así que se espera un duelo de muchos puntos.
LEG