Huixtla, Chiapas. En los dos días que permanecieron en el municipio de Huixtla los cinco mil centroamericanos que integran la caravana migrante, se recibieron reportes de robos al interior de su campamento, reveló el presidente municipal, José Luis Laparra Calderón.
“Sí me reportaron actos de robo entre ellos mismos, (pero es que) viene gente buena y gente mala, así como hay mexicanos buenos y malos”, afirmó el funcionario.
“(Nosotros) no podemos señalar (a nadie), brindamos la atención a todos por igual”, indicó Laparra Calderón.
Una de las coordinadoras de la caravana también confirmó, desde el lunes por la noche, que hay algunos “compañeros” que han quitado celulares a otros.
“Vino una y me dijo que otro le había arrebatado el celular de la mano, y le dije: ‘sí mami, ¿y qué quieres que haga, qué me ponga a cuidarlos a todos?’”, comentó la coordinadora.
Agregó que ella, como encargada de mantener el orden, principalmente en los trayectos por carretera, no es bien vista por algunos migrantes que no gustan de ser mandados, y menos por una mujer.
“La verdad es que yo cuando me quedo a dormir con los compañeros (en las plazas públicas) duermo nada más dos horas, no me confío porque no sé qué puedan hacer”, dijo.
Prefirió mantenerse en el anonimato, no tanto por el riesgo que corre al interior de la caravana, sino porque ha conseguido su visa humanitaria mexicana y “yo no debería de andar en esto, yo radico en el norte, pero ando apoyando”, aunque sí indicó que pertenece a la organización Los Sin Frontera.
Lazos forjados
Por otra parte, entre los más jóvenes, que viajan en la caravana se han identificado y establecido lazos de amistad para cuidarse entre ellos.
Es el caso Helio, con 16 años de edad, Alejandro y Josué de 20, quienes son parientes y salieron de Guatemala en compañía de su amiga Tania, de 17 años; en el camino se les unió Christian, un joven hondureño que viajaba solo.
Entre ellos se procuran y no se separan, “para no aburrirnos”, dijo Josué; el poco dinero que traían ya se les terminó y ante las versiones de que son financiados para llegar a la frontera norte, comentó que nadie les ha ayudado en ese sentido.
“Vamos sólo con lo que nos han dado en México, que nos dan bocado, nos dan comida, nos dan agua, pero dinero no, ya se nos acabó el que traíamos”, comentó Josué.
Otro migrante, Maryuri Yáñez, manifestó que de políticos sólo conoce al Presidente hondureño, se enteró de la caravana por redes sociales y el dinero que carga consigo es producto de sus ahorros, pero hasta el momento nadie les ha dado más allá de agua, comida, ropa y zapatos.
Reponen fuerzas en Huixtla
Luego de la ayuda humanitaria que brindó el ayuntamiento y la población de Huixtla, los integrantes de la caravana migrante repusieron fuerzas y salieron esta mañana con rumbo hacia el municipio de Escuintla, a 30 kilómetros de distancia de esta localidad.
Según los organizadores la intención es llegar hasta el municipio de Mapastepec, todavía en el estado de Chiapas, sin embargo, hacerlo equivale a caminar. en un solo día, el doble de lo que han estado recorriendo.
En los días que se concentraron en Huixtla se otorgaron 700 dosis de sueros orales, más de 1800 consultas, 470 curaciones, y poco más de 30 vacunas, principalmente la antitetánica, precisó la directora del Centro de Salud Urbano, Gloria Olvera Hernández.
Resaltó que la atención no sólo fue de parte de la Secretaría de Salud estatal, sino que también recibieron apoyo de una iglesia evangélica, además de una unidad móvil y el médico del ayuntamiento.
Aseguró que detectaron al menos 30 mujeres embarazadas, de las cuales ocho tienen más de 30 semanas de gestación, lo cual las pone en alto riesgo en caso de necesitar atención durante sus trayectos.
LEG