Dotar de agua a la Ciudad de México a través del sistema del río Cutzamala despliega conflictos sociales y ambientales en las comunidades de esta cuenca, advirtió hoy la especialista Rosario Pérez Espejo.
El sistema tiene muchas aristas y resulta “insustentable” pues arrebata el agua a zonas donde también es muy requerida, provocando problemáticas sociales, institucionales y dificultando la actividad agrícola, señaló.
Durante la conferencia de prensa “¿Cuánto cuesta tener agua en la Ciudad de México?”, Pérez dijo que las comunidades que sufren los efectos colaterales son de los estados de México y Michoacán, donde se encuentran las subcuencas del río Cutzamala.
“El sistema es muy costoso, el agua no la pagamos solamente por traerla, existe un costo de oportunidad del agua, el hecho de que se dejen de realizar actividades en los lugares donde la extraemos”, señaló Pérez, del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Estas dificultades que sufren estas poblaciones, a las cuales hay que sumarles que el 42 % vive en situación de pobreza, están provocando éxodos hacia las grandes metrópolis.
Estimar los costos totales que implica abastecer de agua a la capital mexicana resulta sumamente complejo por sus múltiples aristas: mantenimiento de las plantas, distribución, energía eléctrica y potabilización, subrayó.
La especialista deslizó una cifra tomada de una investigación del tabloide inglés The Guardian en el año 2015: 2.400 millones de pesos (123 millones de dólares) anuales para el abastecimiento.
Esta cifra podría haber aumentado en los últimos años aunque tampoco está claro cuánto. “Podría haber sido un 20 o un 30 %”, precisó vagamente.
Cabe decir que del abastecimiento del Cutzamala entre un 30 y 40 % se pierde en fugas, un problema que la experta no contabilizó monetariamente.
El académico de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, Gerardo Ruiz Solorio, reveló que a nivel energético, para que el bombeo de agua funcione se gastan mil 600 millones de pesos anuales (82 millones de dólares).
Cabe saber que la factura de servicio se encuentra subsidiada por el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y el precio varía dependiendo de la zona.
Ambos expertos coincidieron en que para las ingentes cantidades que paga el Estado para mantener el servicio, el costo que paga el ciudadano es muy bajo.
Para finalizar, el especialista exhortó a la población a fomentar una “cultura del agua” en la que predomine el ahorro del vital líquido.
“Si ahorramos agua, ahorramos energía, y si ahorramos energía va a ser menos costoso para el Gobierno”, aseguró.
El próximo día 31 la capital mexicana verá cortado el suministro de agua en 13 de sus 16 alcaldías por mantenimiento en el sistema Cutzamala hasta el 3 de noviembre.
Este hecho está haciendo que numerosos expertos apoyen a la población con consejos y medidas que ayuden a afrontar esos días que, esperan de paso sirvan para tomar conciencia sobre el privilegio de contar con este líquido vital.
ncg