El Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, llegó con un mal sabor de boca a la consulta para definir el destino del Nuevo Aeropuerto Internacional de de México (NAIM), pues le disgustaron las opiniones que el comunicador Carlos Loret de Mola hizo en radio contra ésta.
El morenista arribó a las 8:18 horas a la mesa ubicada frente a la sede de la alcaldía Tlalpan para votar.
Contrario al sufragio que hizo el 1 de julio, esta vez llegó sin la compañía de su esposa Beatriz Gutiérrez e hijos. Se dirigió a la fila y soltó una declaración a los medios, la cual estuvo cargada contra un comunicador.
“Venía escuchando y escucho que gritaba como pregonero Loret de Mola, diciendo que va a haber devaluación e incertidumbre, pues eso no es lo más adecuado”, expresó en referencia a que la consulta podría vulnerar la economía mexicana.
El morenista calificó de “nefasto, antidemocrático“ al conductor, y lo culpó de intentar meter miedo contra el ejercicio.
Además, ironizó con el hecho, pues resaltó que no sabía que los medios de comunicación también eran inversionistas en el proyecto del aeropuerto que se desarrolla en Texcoco.
Loret de Mola respondió en su programa radiofónico que no entendía las declaraciones del Presidente electo:
“Yo sí estudié economía, yo sí sé que hay una diferencia entre depreciación y una devaluación… pues ni modo que no lo digamos porque no le gusta”.
Por la mañana, el Presidente electo emitió su voto, y resaltó que se va a respetar la voluntad de los ciudadanos. Ante el exceso de cámaras, optó por dejar la boleta en blanco.