La caravana integrada por migrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala, que avanza hacia la frontera de México con Estados Unidos, decidió de último momento cambiar la ruta y hacer la siguiente parada en el municipio de Matías Romero, en Oaxaca.
La noche de este miércoles se había anunciado que la siguiente parada sería en Jalapa del Marqués, ubicado 40 kilómetros de Juchitán, sin embargo, la asamblea extraordinaria decidió modificar la trayectoria.
En la salida de la que será la terminal de autobuses de Juchitán, Gina Morales, integrante de Pueblos sin Fronteras, organización que ha acompañado a la caravana, dijo esta mañana que este cambio se hizo para proteger al contingente, pues avanzar hacia la ciudad de Oaxaca, dijo, implicaría muchos peligros.
Indicó que esa ruta se había tomado porque les ofrecieron más de 70 autobuses para transitar por esas carreteras, pero de último momento, cancelaron la mayor parte de ese apoyo y, por ello, optaron llegar a la Ciudad de México por Veracruz.
Además, Morales apuntó que en la caravana hay muchos niños que están enfermos y en el camino hacia Oaxaca no hay hospitales, por lo que la mejor alternativa es dirigirse hacia el estado de Veracruz.
Muchos migrantes centroamericanos han rechazado esta opción, porque aseguran que es un retroceso y consideran que la ruta es peligrosa. En la entrada del albergue temporal, algunos grupos se organizan para avanzar hacia la ciudad de Oaxaca.
Debido a la confusión que ocasionó el cambio de ruta, la caravana muestra poca disposición para avanzar y ha preferido continuar en el refugio, mientras que grupos muy pequeños caminan desde las 06:00 horas con rumbo a Matías Romero.
El contingente permaneció por dos días en Juchitán de Zaragoza, donde se le cobijó y ofreció comida, bebidas y alimentos, aunque muchos habitantes pedían que ya se fueran, ya que los consideraban un peligro para sus familias.
TFA