BUENOS AIRES.- El gobierno argentino reconoció que no tiene la capacidad técnica para rescatar el submarino de la Armada que desapareció hace un año con 44 tripulantes a bordo y que fue encontrado en medio de una conmoción social.
“No tenemos medios ni siquiera para bajar a las profundidades del mar, ni tenemos equipamiento para extraer un buque de estas características”, confesó el ministro de Defensa, Oscar Aguad, en rueda de prensa.
El funcionario explicó que “el próximo paso es tener toda la información de la empresa que buscó al submarino, por contrato nos tienen que dar toda la información y seguramente después nos pondremos a estudiar y ver qué hacer”.
También aclaró que “muchas de las decisiones que tomemos las tiene que tomar la justicia”, ya que hay una causa en marcha para investigar cómo y por qué desapareció el submarino.
Cuestionado sobre la posibilidad de rescatar los cuerpos, el jefe del Estado Mayor de la Armada, José Luis Villán, advirtió por su parte que por ahora “la palabra adecuada es prudencia” porque “tenemos información preliminar y acá hay dos límites que exceden nuestro conocimiento”.
Explicó que un freno es legal, ya que la jueza que está a cargo de la investigación determinará en qué momento se podrían remover los restos del submarino, mientras que el segundo límite es técnico porque no se sabe si se pueden rescatar cuerpos o restos de los tripulantes.
La firma estadounidense Ocean Infinity, que estaba a cargo de la búsqueda desde hace casi dos meses, confirmó la noche del viernes la localización de la nave, tarea por la cual obtendrá un pago de 7.5 millones de dólares.
El submarino fue encontrado a 907 metros de profundidad y 500 kilómetros del Golfo San Jorge, a la altura de la ciudad patagónica de Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut.
El 15 de noviembre del año pasado, el submarino dejó de tener contacto con los operadores en tierra cuando estaba ubicado en aguas de esa provincia que está ubicada a casi mil 400 kilómetros de Buenos Aires y desde donde reportó su última posición.
Luego de varios días de incertidumbre, la Armada confirmó que ese día, tres horas después del último contacto que el submarino tuvo con la base naval, se había registrado una explosión en la zona.
Desde entonces, la principal hipótesis fue que la nave había estallado sin dejar sobrevivientes, lo que ahora podrá investigarse.
Cuando el submarino desapareció, más de 13 países participaron en un operativo internacional inédito que fracasó, por lo que de a poco las delegaciones de expertos fueron partiendo.
Los familiares reclamaron en diversas ocasiones la insensibilidad mostrada por el gobierno, ya que consideraron que el presidente Mauricio Macri no atendía la tragedia con la prioridad que ameritaba.
dpc