La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) redujo su pronóstico de crecimiento económico para el cierre del 2018, al pasar de 2.5% previsto en mayo pasado, a 2.2% en su último informe de perspectivas económicas presentado este miércoles.
El organismo que dirige José Ángel Gurría explicó que la economía mexicana tendrá que enfrentar retos significativos, como el de garantizar certidumbre en las inversiones y combatir la informalidad, encomiendas que tendrá que resolver la próxima administración a cargo de Andrés Manuel López Obrador.
Pese a los retos antes mencionados, la OCDE estimó que en 2019 la economía mexicana crecerá 2.5% y para el 2020 llegará a una expansión del 2.8%.
“El consumo interno y las fuertes exportaciones están impulsando el comportamiento positivo de la economía mexicana, que crecerá más fuerte en los próximos dos años, a medida que los riesgos vayan disminuyendo”, señaló el organismo en su documento.
Para la OCDE, uno de los factores que sigue siendo un “lastre” para el desarrollo de la economía mexicana, es la caída en la producción de petróleo y los precios de este hidrocarburo a nivel mundial. Ello se suma a una inversión “persistentemente baja”, aumento en la inflación y presiones sobre el peso.
“La inflación ha sido empujada hacia arriba por el aumento de los precios de la energía, pero las expectativas y la inflación subyacente permanecen ancladas y dentro de la banda objetivo del banco central”, precisó.
En contraste, indicó que lo que impulsa a México es la demanda externa, además de un bajo nivel de desempleo, fortaleza de las remesas y la recuperación de los salarios.
“Más allá de 2020, México podría sufrir un recorte de sus exportaciones a Estados Unidos debido a una desaceleración de la economía de la unión americana”, advirtió el organismo internacional que opera en París.
Con el fin de mantener una estabilidad macroeconómica y crecimiento del PIB en los próximos años, la OCDE recomendó continuar con las reformas estructurales, mantener la política monetaria, disminuir el nivel de deuda pública, consolidar los programas sociales, elevar la recaudación de impuestos, disminuir la evasión y combatir la informalidad.
Aunque esto último será un reto mayor, pues en el Gobierno Lopezobradorista se vislumbra un incremento en el nivel de desempleo, ante los ajustes previstos en diversos sectores, y políticas que pudieran fomentar que los mexicanos se empleen en vías informales.
Asimismo, se suma la presencia de migrantes centroamericanos en los Estados fronterizos del país, que podrían elevar los niveles de informalidad, pobreza y desempleo, según lo dicho por especialistas en la materia consultados previamente por 24 HORAS.
En tanto que respecto a sus previsiones para la economía mundial, la OCDE también fue pesimista, pues redujo su pronóstico de crecimento al pasar de 3.9% a 3.5%.
… Y urgen a combatir la piratería
Actualmente ocho de cada 10 mexicanos consumen productos piratas y no consideran esta práctica como un delito grave, pese a que le cuesta al país 43 mil millones de pesos anuales, reportó la American Chamber of Commerce of Mexico (AmCham).
El organismo presentó una estrategia contra la piratería, donde participaron diversas instituciones y asociaciones civiles, con el fin de que la próxima administración haga un análisis sobre ello, y pueda implementar acciones para su combate.
La presidenta del Comité de Derechos de Propiedad Intelectual de la AmCham, Ana María Magaña, sostuvo que la piratería es considerada una debilidad del Estado de derecho, asociado a la corrupción y la inseguridad a la que se enfrentan las empresas que operan en el territorio nacional.
Asimismo, la especialista refirió que actualmente México ocupa el quinto lugar a nivel mundial en el consumo de piratería digital. Además, recordó que el 63.7% de personas consume películas piratas y se espera que para 2022 el país se coloque entre los primeros cinco lugares de consumo de piratería a nivel mundial en dicho rubro.
Consideró preocupante también que aquellas personas que consumen piratería, señalaron que lo volverían a hacer, pues no lo consideran un delito grave
LEG