Las instituciones de educación superior requieren del respeto irrestricto a su independencia, autonomía y libertad para reflexionar, disentir y decidir sus rumbos, pues sólo sin injerencias o intereses externos pueden propiciar los espacios para que el análisis crítico, reflexivo y propositivo favorezca la transformación social, aseguró Enrique Graue Wiechers, rector de la UNAM.
Durante la entrega de los premios Universidad Nacional y los reconocimientos Distinción Universidad Nacional para Jóvenes Académicos 2018, Graue afirmó que la autonomía es una imperiosa necesidad de las universidades.
“En el caso de la UNAM, es una autonomía que hemos construido a lo largo de casi nueve décadas, y que se ha consolidado con firmeza, valor, y no pocas veces con dolor y sangre. Esta autonomía nos permite un gobierno en el que toda la comunidad participa en las diversas decisiones que rigen y autorregulan nuestro actuar”.
El rector destacó que los galardones entregados hoy simbolizan la esencia de las funciones sustantivas de la Universidad: “educar para transformar; investigar con rigor y responsabilidad; innovar y crear para modificar la realidad; difundir nuestra cultura para comprender y convivir en una sociedad plural. Y todo ello lo hemos llevado a cabo con independencia, autonomía y libertad”.
fahl