Al menos 21 personas murieron y otras 180 resultaron heridas por las lluvias torrenciales registradas entre el viernes y el sábado en diferentes provincias de Irak, informó hoy a Efe el portavoz del Ministerio de Salud, Seif al Badr.
“Aumentó a 21 el número de muertos y de heridos a 180 durante los últimos dos días” por las inundaciones en varias áreas del país, indicó la fuente.
Precisó que la provincia más afectada es Saladino, al norte de Bagdad, donde fallecieron diez personas, así como la de Wasit, en el centro de Irak, en la que perdieron la vida ocho personas.
Otras tres personas murieron en la regiones de Ramadi, Diwaniya y Basora, afirmó la fuente, sin ofrecer más detalles sobre cómo se produjeron los fallecimientos.
Por otra parte, la oficina del gobernador de la provincia de Wasit decretó en un comunicado que el domingo es día festivo a causa de las desfavorables condiciones metrológicas.
Entre el viernes y el sábado, Irak se vio azotada por fuertes lluvias que provocaron que un gran número de personas se hayan visto desplazadas de sus viviendas por las inundaciones, según fuentes policiales.
El Ministerio iraquí de Recursos Hídricos indicó en una nota que la situación de emergencia ocasionada por las lluvias torrenciales, que golpearon sobre todo la parte oriental de Irak, está “controlada”.
El primer ministro iraquí, Adel Abdelmahdi, ordenó el viernes formar un gabinete de crisis y aseguró en un comunicado que estaba supervisando personalmente la atención a las víctimas de las lluvias torrenciales.
Desde finales de octubre la región de Oriente Medio se ha visto afectada por inundaciones que han dejado decenas de muertos en varios países, con Jordania como el más afectado con más de 30 fallecidos.
aarl