El procedimiento de fertilización in vitro (FIV) podría detectar el bajo coeficiente intelectual del futuro embrión, como una forma de evitar las altas probabilidades de desarrollar “discapacidad mental”, a través de las pruebas de investigación que desarrolla actualmente la firma Genomic Prediction.
La empresa sólo ofrecería la opción a embriones con las citadas probabilidades. Pero a decir de su cofundador, Stephen Hsu, la misma técnica podría utilizarse para detectar los embriones que podrían tener un coeficiente intelectual más alto, “si no lo hacemos nosotros, otra compañía lo hará”.
Por años, como parte de la FIV, se han realizado pruebas genéticas más simples en embriones, las cuales pueden descubrir otras afecciones causadas por un solo gen, así como las provocadas por anomalías cromosómicas, como el síndrome de Down.
En años recientes, a través del análisis simultaneo de varias regiones de ADN, se podía conocer las posibilidades de tener ciertas condiciones médicas, para calcular algo llamado “puntaje de riesgo poligénico”.
Las pruebas no serían tan exactas para decir el coeficiente intelectual de cada embrión, pero sí indicarían cuáles son los valores atípicos genéticos. Este hecho, detalló Hsu, permite a los futuros padres evitar embriones con una alta probabilidad de coeficiente intelectual de 25 puntos por debajo del promedio.
El paso que seguiría de la prueba es seleccionar el embrión con mayor probabilidad de tener un coeficiente intelectual alto, lo que supondría un potencial intelectual “muy por encima del promedio”, definió el cofundador de la compañía.
Entre otras de las condiciones genéticas que descubriría el “puntaje de riesgo poligénico”, se encuentran enfermedades del corazón, cáncer de mama, diabetes 1 y 2, o enfermedades inflamatorias intestinales.
LEG