La compañía automotriz General Motors (GM) anunció el recorte del 15% de su plantilla de trabajadores, incluido un 25% de sus ejecutivos, así como el cierre de siete plantas a nivel mundial, de las cuales cinco serán en Estados Unidos y Canadá.
La presidenta de la mayor productora de automóviles en Estados Unidos, Mary Barra, explicó que la decisión de reestructura se debe a que la empresa ha tenido sobrecostos por la imposición de aranceles de acero y aluminio, además de que se modificarán los planes de producción a vehículos eléctricos y de conducción autónoma.
“Estas acciones incrementarán las ganancias de largo plazo y la generación de dinero en efectivo de la empresa, así como mejorarán su resilencia a través del actual ciclo”, señaló.
Se prevé que el recorte impacte a unos 15 mil empleados y se cierren cinco plantas en Norteamérica, tres de montaje y dos de producción de motores y transmisiones.
La decisión tuvo reacciones en Canadá y Estados Unidos, pues el primer ministro, Justin Trudeau, ofreció apoyo a los trabajadores que serán afectados por el cierre de la planta de GM en la ciudad de Oshawa, en la provincia de Ontario, prevista para diciembre de 2019.
“Sabemos que el anuncio de cierre tendrá un significativo impacto en toda la comunidad de Oshawa y en la red de abastecedores de la región. Nuestro gobierno apoyará a los trabajadores en este difícil momento”, dijo.
El gobernador de Ontario, Doug Ford, se refirió a los aranceles impuestos por el Gobierno de Donald Trump y dijo que las tarifas de 25% a la importación de acero y 10% a la de aluminio, fueron “un duro golpe” a la industria automotriz de la región Norteamericana.
En tanto Trump, criticó a la empresa por cerrar siete plantas de producción y le exigió encontrar un automóvil que “venda” lo suficiente para retomar su actividad.
LEG