The New York Times informó que el pasado sábado en la reserva nacional Yellowstone, un cazador mató a la loba favorita del parque, Spitfire.
La también apodada Reina del Valle de Lamar, de siete años, fue asesinada igual que su madre en 2012. Ambas lobas pertenecieron a la manada más grande del Lamar Canyon.
Dadas las condiciones y la ubicación de la loba, el Departamento de Pesca, Vida Silvestre y Parques de Montanaconfirmó que Spitfire murió de manera legal, pues el estado de Montana permite la caza desde el 2011.
En contrapunto a este veredicto, civiles llaman en redes sociales a repensar la legalidad de la cacería en el estado.
jhs