A fin de dar una mejor atención a los centroamericanos de las caravanas que llegaron a Tijuana, Baja California, autoridades federales, estatales y municipales renovaron El Barretal, refugio temporal para estos migrantes que buscan cruzar a Estados Unidos desde la ciudad fronteriza.
Para ello realizaron labores para mejorar la salubridad, combatir los efectos de la lluvia y el frío, garantizar la sana alimentación y brindar condiciones de seguridad para quienes se trasladaron del anterior refugio.
Además, se informó que existe la capacidad de repartir seis mil raciones de alimentos en tres turnos diarios, debido a cocinas instaladas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Marina (Semar).
En tanto, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) instaló dos plantas potabilizadoras para mantener la hidratación de los refugiados y la Secretaría de Salud desplegó un hospital móvil de 10 camas con funcionamiento las 24 horas.
Además con el acompañamiento del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, por sus siglas en inglés), se han creado espacios especiales para la alimentación de niños, todo esto bajo la supervisión de la Coordinación Nacional de Protección Civil.
Las autoridades de los tres niveles de Gobierno reconocieron que todavía hay mucho por hacer, pero con la voluntad y el trabajo coordinado se prevé avanzar en las mejoras de las condiciones de los migrantes, con el objetivo de hacer valer sus derechos humanos.
Cabe recordar que más de seis mil migrantes llegaron a Tijuana en las últimas semanas debido a la organización de caravanas desde El Salvador y Honduras, las cuales cruzaron el país desde la frontera sur y ahora están a la espera de ser recibidos por autoridades de EU para solicitar asilo, con la esperanza de ser admitidos en ese país como refugiados que escapan de la violencia.
LEG