El Congreso de la Ciudad de México aprobó ayer el dictamen para promulgar una nueva Ley de Reconstrucción, con la que se busca apoyar a quienes resultaron afectados por el sismo del 19 de septiembre del año pasado.
La nueva ley contó con el respaldo de todos los grupos parlamentarios, consenso que fue reconocido por la oposición. Fueron 62 votos a favor del dictamen, con lo que se espera su próxima publicación en la Gaceta Oficial de la CDMX.
La Ley para la Reconstrucción Integral de la Ciudad de México, a diferencia de la anterior, reconoce a la vivienda unifamiliar para el otorgamiento de los apoyos; sin embargo, no detalla las herramientas de financiamiento, pues aún falta por elaborarse un Plan Integral para la Reconstrucción.
En el contenido, se menciona que el apoyo a renta, para propietarios de viviendas inhabitables, se otorgará hasta que se garantice una vivienda para los afectados.
Uno de los problemas de la Ley anterior fue que había distintos censos en las dependencias y cada una tenía sus herramientas de atención, lo que dificultó los apoyos. Por ello, se le dieron mayores facultades a la Comisión de Reconstrucción, con el objetivo de centralizar la información y gestión de proyectos.
El artículo 31 señala que los inmuebles reconstruidos con recursos públicos no podrán ser enajenados por un periodo de cinco años a partir de su entrega, psara garantizar la inversión de los recursos públicos, con el fin de evitar la especulación inmobiliaria y proteger el inmueble.
Al respecto, el arquitecto Óscar Sanginés Coral, vicepresidente en Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México, calificó como positivas las modificaciones de la ley, pues había varios temas que no fueron considerados en la anterior, aunque faltan reglamentos para definir su operación.
Detalló que fue un acierto considerar a las viviendas unifamiliares, siendo que eran “la rebanada más grande del pastel”.
LEG