Foto: Cuartoscuro/Archivo La impunidad en México incentiva y motiva ser corrupto, un negocio altamente redituable  

La situación de México es preocupante, hay más corrupción porque existe impunidad a diez años de la instrumentación de las reformas en materia de justicia penal, de acuerdo con indicadores de The World Justice Project el país se ubica en el lugar 105 de 113 en materia de justicia penal, refirió Estefania Medina, fundadora de la asociación civil Tojil – Estrategia contra la impunidad.

 

Estos índices, agregó la abogada en el marco del Día Internacional Contra la Corrupción, colocan a México a nivel internacional en el lugar 92 de 113 en materia de Estado de Derecho, mientras que Transparencia Internacional, lo posiciona en el sitio 135 de 180 países, “una calificación inferior a la obtenida en el año anterior”.

 

En materia de investigaciones por actos de corrupción, agregó, los resultados de la Procuraduría General de la República son prácticamente nulos, lo único destacado es la sentencia que se le impuso al ex gobernador Javier Duarte, sentencia que se llevó a cabo bajo un procedimiento abreviado, enrarecido y en el que se le impuso una pena de tan solo 9 años.

 

La pena que se le impuso a Duarte de Ochoa, “no fue por decisión de un juez, sino a solicitud de la PGR, que previamente había alcanzado un acuerdo con Javier Duarte, el mismo que presentaron ante un juez y fue obtenido a través de lo que se conoce como un procedimiento abreviado”, sostuvo.

 

La sentencia que se le impuso a Javier Duarte, puntualizó, puede ser revertida con “buena conducta” en el tiempo que se encuentre preso, él puede acceder a un beneficio de liberación, que ya se encuentra establecido en la ley.

 

Explicó que los delitos de lavado de dinero y asociación delictuosa no tienen una víctima directa como tal, razón por la que la PGR no solicitó una reparación del daño, pero que en el caso concreto de Javier Duarte, se podía tener como víctimas al erario de Veracruz o al federal y a la colectividad en general porque son los ciudadanos quienes pagan sus impuestos mismos que no se utilizaron para los fines establecidos en ley.

 

En México parece que no importan que tan escandaloso pueda un acto de corrupción, como a los funcionarios no les va a pasar nada, eso incentiva y motiva que prácticamente el ser corrupto, sea un negocio altamente redituable, finalizó.

 

aarl