Aldo Amenta, un estudiante que quedó confinado a una silla de ruedas después de un accidente en una alberca, logró caminar el día de su graduación con la ayuda de un exoesqueleto.
El venezolano Aldo Amenta se graduó de la carrera de ingeniería eléctrica de la Universidad Internacional de Florida, después de que en 2015 quedó confinado a una silla de ruedas por un accidente al bucear.
El recién graduado se rompió el cuello con el fondo de una alberca hace 3 años, lo que le “cambió completamente” la vida, según declaraciones del venezolano.
A pesar de las dificultades de salud y haber considerado dejar sus estudios, Amenta logró conseguir una beca de la Universidad ubicada en Florida, para finalmente caminar el día de su graduación con ayuda del exoesqueleto.
Con información de medios
AETC