El maratón ya inició Guadalupe-Reyes. Ahora no será sólo para enfiestar; en el contexto de los nuevos Gobiernos, tendrá que ser también para comenzar la demostración de eficiencia en materia de seguridad y procuración de justicia.
No hacerlo es abonar a las críticas que harán, como deben, quienes fueron vencidos por Morena y que serán acompañadas muy probablemente, al inicio de año, por quienes sientan que no se advierte la entrega de resultados a una velocidad correspondiente con la expectativa.
Si hay una lista de 14 delitos graves identificados en 17 ciudades como de observación más relevante, uno de ellos destaca por su generalizada aplicación en los enclaves donde la autoridad tiene una enorme oportunidad de aportar definiciones.
En todas las plazas del país, especialmente en la capital, Veracruz, Monterrey, Puebla y Jalisco, muchos ciudadanos que han participado de la economía informal o que se agregan a ella en busca de una oportunidad para ingresar recursos adicionales a sus hogares, intentan y han conseguido colocarse en la vendimia de calles y centros de reunión principales.
La mayoría de ellos no tienen muy clara la diferencia entre “extorsión”, “cobro de piso” y “cuota para el líder”, y ya han puesto a circular sus quejas ante alcaldías y municipios.
Sería relevante que los presidentes municipales y los alcaldes compartieran con la opinión pública las quejas que han recibido, así como las propuestas para atenderlas.
Para las autoridades locales no es aplicable la disposición anímica de mandar a vacacionar a las peticiones de esos ciudadanos al ignorar o hacer como que “les habla la Virgen”, quien en su cumpleaños evidenció que la coordinación de seguridad permitió dejar un saldo blanco agradecible.
Uno de los casos ilustrativos de las nuevas condiciones de operación de “liderazgos” y “organizaciones” es el correspondiente al Centro Histórico de la Ciudad de México, en donde las cuotas han pasado para los clientes habituales de líderes y “grupos de ellos” de 100 a 400 pesos por metro cuadrado y para el Guadalupe-Reyes una cuota extra que asciende a dos mil 500 pesos.
Lo que es extraordinario no es solamente que se añada una cuota semejante, sino la naturaleza de las organizaciones que ahora las imponen.
La información a la vista es que ya no son los liderazgos convencionales -para ellos está la cuota de 100 a 400-, sino los que no pueden ser nombrados ni referidos o, al menos, no podían serlo en la administración de Miguel Ángel Mancera.
A nivel federal, Alfonso Durazo y en el nivel local, Jesús Orta, responsable de las Secretarías de Seguridad, han planteado que deberá concluir un diagnóstico del “estado de la cuestión” respecto de las nuevas tensiones que se están generando desde hace un par de años más intensamente en todas las ciudades.
Entre esas tensiones están las que son originadas por los “nuevos grupos” que operan en este Guadalupe-Reyes, de acuerdo a los testimonios a la vista.
Ojalá que entre Santa Claus y los Reyes Magos se asome al árbol navideño el regalo de nueva información positiva para empezar un mejor ciclo. Habrá que trabajar a toda velocidad.
@guerrerochipres