El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, en inglés) denunció en un informe publicado hoy que China, Egipto y Arabia Saudí fueron los países donde más aumentaron las detenciones de periodistas y que, “como mínimo”, 251 siguen encarcelados en todo el mundo.
De acuerdo con el estudio, aunque en esos países es donde más incrementaron los arrestos este año, Turquía, con 68 profesionales entre rejas, sigue liderando la lista de Estados con más reporteros presos.
Para CPJ, estas cifras indican que “la respuesta autoritaria a la cobertura informativa crítica va más allá de un incremento temporal”.
El 70 % de los informadores que se encuentran arrestados ha sido acusado de “cometer delitos contra el Estado”, así como por pertenecer a organizaciones consideradas terroristas o por colaborar con estos grupos armados.
Este año, 28 periodistas fueron incriminados por difundir “noticias falsas”, cuando hace dos años solo fueron nueve.
Egipto lideró este tipo de acusaciones, con 19 detenidos, seguido de Camerún (4), Ruanda (3), China (1) y Marruecos (1).
Según la organización, “este incremento se da ante el auge mundial de la retórica sobre las ‘noticias falsas’, de la cual el presidente estadounidense, Donald Trump, es el mayor protagonista”.
En China, que ahora mismo cuenta con 47 comunicadores en prisión, el aumento del acoso se debe a una mayor presión por parte del presidente Xi Jinping, además de por la persecución de la minoría étnica uigur en la región de Xinjiang, con una decena de periodistas detenidos en esta zona sin que hubieran sido acusados previamente.
Aquí, el caso más flagrante es el del fotógrafo “freelance” residente en EU, Lu Guang, ganador de varios premios World Press Photo y de National Geographic, que desapareció a principios de noviembre.
Por lo que respecta a Egipto, el régimen de Abdelfatah al Sisi ha incrementado el arresto de informadores y los ha incorporado a juicios masivos en curso, como el caso de Mohamed “Oxígeno” Ibrahim, un bloguero que difundía irregularidades electorales y el abuso policial.
Arabia Saudí, por su parte, lleva semanas en el ojo del huracán por el asesinato del periodista y columnista del diario estadounidense Washigton Post Jamal Khashoggi en el consulado de Estambul.
Asimismo, CPJ apuntó que en octubre “recrudeció la represión” contra los informadores nacionales, con al menos 16 comunicadores encarcelados hasta el 1 de diciembre.
En EU, donde el presidente Trump ha sido muy crítico con el trabajo de la prensa, nueve periodistas fueron arrestados en el transcurso del año, aunque posteriormente fueron liberados.
jhs