Mientras que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos todavía hará un incremento en sus tasas de interés este año y entre dos y tres en 2019, se espera que el Banco de México (Banxico) mantenga los niveles actuales, consideró la firma HR Ratings.
El director general de Análisis de HR Ratings, Félix Boni, comentó que conforme se cumpla el estimado de inflación que estableció del gobierno federal en el proyecto de Presupuesto 2019, de 3.8%, el banco central podría comenzar una baja paulatina de los tipos de interés.
Este miércoles, la Fed dará a conocer su anuncio de política monetaria en el que se espera un incremento de 25 puntos base, mientras que Banxico hará lo mismo el próximo jueves, para lo cual la mayoría de los analistas prevé un incremento de 25 puntos base en la tasa de interés de referencia, para colocarla en 8.75%.
“Nosotros estamos pensado que la Reserva Federal va a subir una vez más este año y el próximo año dos o tres veces, la verdad es que la inflación ha estado bastante controlada en Estados Unidos, a pesar del fuerte de crecimiento”, por lo que sí habría espacio que el instituto central fuera menos agresivo, dijo.
Para el Banxico, “estamos suponiendo que las tasas se van a mantener como están, aunque hay mucha gente que piensa que podrían haber otros incrementos, pero en términos generales suponemos que estamos en los próximos meses en punto de ir viendo muy paulatinamente una reducción en las tasas, especialmente porque tenemos una economía cuyo crecimiento está siendo menor de lo óptimo”.
Consideró importante que la inflación disminuya durante el próximo año, lo que dependerá en gran parte de la política en términos de gasolina que adopte el gobierno, porque ese precio es muy crítico y puede tener impactos importantes en muchos elementos de la economía.
Por otro lado, el experto comentó que la renegociación de los bonos emitidos por el Fideicomisos del Aeropuerto de la Ciudad de México podría afectar el flujo de capitales hacia el país.
“Es un riesgo y sí puede afectar a flujos de capital y es una de las razones por lo cual tenemos la perspectiva negativa, básicamente por esa posible amenaza y hay que ir evaluando cómo van las negociaciones y las acciones que tome para aumentar o deteriorar más la confianza de los inversionistas”, puntualizó.
En octubre pasado, la calificadora de riesgo ratificó la calificación de largo plazo de HR A- (G) y de corto plazo de HR2 (G) para la deuda soberana de México y modificó la perspectiva de estable a negativa.
El experto dijo que esperarán entre 12 y 18 meses para evaluar las políticas del nuevo gobierno, así como ver la solución de la renegociación de los bonos para evaluar la calificación y perspectiva.
DAMG