Pocas, muy pocas eran las opciones que se le daban a los Bears para enfrentar esta campaña, tras cuatro años en los que se anclaron en la parte más profunda de la División Norte, además de ser uno de los peores equipos de toda la Liga. Las primeras selecciones en cada uno de los últimos Drafts parecían disminuir la huida de talento que cansado de no ganar nada, buscaron nuevos horizontes. Las nuevas adquisiciones no daban una salida al cúmulo de problemas que hacía de Chicago una aduana fácil para cualquiera.
Al finalizar la temporada anterior, John Fox fue cesado como head coach y la apuesta del gerente general, Ryan Pace, fue por un debutante. Matt Nagy fue contratado como nuevo entrenador en jefe, luego de su destacado papel como coordinador ofensivo de los Chiefs. Nadie esperaba que ésta iba a ser la adquisición estelar.
Nagy tuvo la nada sencilla labor de levantar a un equipo que entró en crisis con la llegada de Trestman en 2015. Los últimos años de Lovie Smith al mando de los Bears no fueron muy buenos, pero la hecatombe llegó con Trestman y Fox no pudo revertir la situación. El inicio del camino fue contra Packers, el rival histórico. Cuando la afición de Chicago veía de cerca que terminaría esta maldición contra Green Bay, Rodgers se encargó de lo contrario. Una ventaja de 17 puntos se esfumó en segundos con la puntería del quarterback de Packers y les propinó su primera derrota. Los recuerdos más lúgubres volvían.
Las cosas mejoraron en las siguientes tres semanas. Mismo número de triunfos ante Seattle, Arizona y Tampa Bay. Antes de la semana de descanso llegó una sorpresiva caída ante Miami. En este lapso, el balance para los Bears era bueno, considerando las campañas anteriores, más allá del resultado, el equipo mostraba eso que no se les veía: hambre de trascender.
En la Semana 6, los Patriots les dieron su tercera derrota, aunque los Bears estuvieron a punto de mandar a tiempo extra. Una yarda fue la diferencia. Además, la forma de jugar mejoró bastante.
La ilusión se volvió realidad
A partir de la Semana 7, arribó el mejor momento para el equipo. Literalmente, revivieron los Monsters of the Midway. Cinco triunfos consecutivos Jets, Bills, Vikings y dos veces ante Lions. La cima de la División Norte sólo vio a un equipo desde entonces. Una caída ante Giants en tiempo extra les rompió la racha positiva, pero el triunfo más inesperado para muchos tuvo lugar la siguiente semana. Los Rams, el mejor equipo de toda la Liga hasta hace unos días, fue frenado en todo aspecto por los Bears y con este gran resultado, el título divisional estaba a un triunfo.
Reyes otra vez
Semana 15. El Soldier Field como escenario y los Packers como rival. No podía ser mejor la situación para reclamar el trono que tanto se les negó. Los Monsters demostraron que nada los detendría en su empresa de llevarse el título divisional, y con una extraordinaria actuación ante los cabezas de queso, lo lograron. Sacks, intercepción, touchdown de larga distancia. Con Rodgers y Packers inició y con ellos se culminó la hazaña.
No se puede asegurar que Chicago será campeón de la NFC, mucho menos que llegará al Super Bowl y replicar lo que hiciera el equipo de laCiudad de los Vientos en 1985. Lo único que se puede dar por un hecho es la ambición y el deseo de un equipo de jóvenes talentos que encaminados de gran manera por un head coach igual de joven van a ser un equipo que a nadie les gustará enfrentar en Playoffs.
La versión de la AFC
Los Texans son otro de los equipos que ha sorprendido gratamente en la temporada actual. Los dirigidos por Bill O’Brien no han hecho tanto escándalo, sin embargo, están a un paso de amarrar uno de los dos primeros lugares de la AFC en playoffs y asegurar la localía.
DeShaun Watson y DeAndre Hopkins han sido una pesadilla para las formaciones defensivas que han enfrentado. JJ Watt regresó a poner el liderazgo que ha consagrado a una defensa sólida y que los tiene con altísimas posibilidades de llegar de forma directa a playoffs.
Los de Houston, tal como Chicago, fueron últimos de su división la temporada anterior. En la campaña actual, se quedaron con la segunda mejor racha ganadora de la NFL y con un triunfo más asegurarán la División Sur de la AFC.
Rivers, callado y ganando
El equipo que podría ser la gran sorpresa de último momento son los Chargers. En su primera temporada en Los Ángeles, Phillip Rivers y compañía tienen el mejor récord de la AFC junto a los Chiefs, y de conseguir dos triunfos y los de Kansas City tienen un tropezón, ganarán la División Oeste y serán el primer sembrado en los Playoffs.
Números
4 triunfos contra rivales de división tienen los Bears esta temporada; habían perdido los 10 juegos anteriores ante estos mismos rivales
6 intercepciones tiene Eddie Jackson al momento; lidera la NFL en este sector y ningún otro jugador tiene más que él desde 2015
8 años tenía Chicago sin vencer a Green Bay; la última ocasión fue en la Semana 3 de 2010 por un marcador de 17-20
9 victorias en fila tuvieron los Texans esta campaña; fue la segunda hilera de triunfos más larga sólo detrás de los Saints que tuvieron 10
Lo que debes saber
El más prolífico. Matt Nagy (10-4) se convirtió en el head coach más ganador en su primera temporada con Chicago desde que George Halas en 1920 (10-1-2)
No sólo es brazo. Mitch Trubisky lleva 402 yardas por tierra; superó a Jay Cutler (232) en su segunda temporada con Chicago y es al momento el quinto quarterback con más yardaje por esta vía
LEG