El secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, señaló que no se puede especular sobre el accidente aéreo en Puebla, donde falleció la gobernadora del estado, Martha Erika Alonso, y su esposo, el senador Rafael Moreno Valle.
“No tenemos más información, no podemos especular de ninguna manera, vamos a ser perfectamente claros y transparentes. Vamos a darles todas las pruebas que vayamos encontrando, no podemos especular de ninguna manera de que se trate de otra cosa que lo que aparentemente es hoy un falla en el aparato”, manifestó.
En conferencia de prensa, el funcionario federal apuntó que no se tiene fecha para que concluyan las investigaciones sobre el accidente, ya que dependerá de cómo avance el trabajo de los expertos.
“El tiempo de la investigación es absolutamente incierto en este momento, puede ser muy rápido si se encuentran pruebas inmediatas, pero puede tardarse más. Esperemos que los investigadores y expertos encuentren pronto pruebas que nos permitan definir cuál fue la causa del accidente”, apuntó.
Jiménez Espriú insistió en que “no sabemos cuánto pueda tardar (la investigación), esperamos que lo hagan lo antes posible, pero que lo hagan con todo cuidado y con todo profesionalismo”.
El titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) refirió que Martha Erika Alonso y su esposo Rafael Moreno Valle tomaron un helicóptero privado, de renta, con destino a la Ciudad de México.
“La torre de control del aeropuerto de Puebla tomó noticia completa del despegue y 10 minutos después se perdió la comunicación; en la torre de control estuvieron llamando y unos segundos después de que se perdió la comunicación se oyó un extraño ruido, que se supone que es el golpe del helicóptero, pero no hay ningún antecedente mayor, no tenemos ningún dato”, dijo.
Agregó que luego del accidente se trasladaron inspectores de inmediato, quienes mañana estarán para ver cuál fue la causa del accidente o para buscar las pruebas correspondientes; asimismo, estarán los representantes del fabricante del helicóptero Augusta y de la fábrica de turbinas, con el director de Aeronáutica Civil y otros inspectores.
Por otra parte, Jiménez Espriú indicó que tanto la aeronave como los tripulantes, el comandante y el primer oficial, tenían sus licencias en regla, vigentes, y el certificado del helicóptero estaba en orden.
“A partir de mañana, que empecemos a recopilar información, estaremos en la obligación de dar a conocimiento público cada uno de los pasos que vayamos dando y cada una de las pruebas que vayamos encontrando”, concluyó.
fahl