Desde finales de septiembre pasado, dimos la alerta de que las principales potencias económicas alcanzaban una cima en su actividad e iniciaban un proceso de desaceleración. Los mercados como el americano y japonés, por ejemplo, tocaron techos y desde entonces transitan por una tendencia secundaria de baja. También datos de Estados Unidos el día de ayer confirmaron una desaceleración, pero será un tema de análisis más a detalle posteriormente.
Datos de manufactura a diciembre confirman que economías como China y la Zona Euro extienden su desaceleración e, inclusive, el Banco Popular de China (su banco central) consideró probable que la economía haya crecido en el último trimestre del año pasado por debajo de 6.5% anual del tercer trimestre, y con ello, valida nuestro escenario.
El problema es que China es relevante en el comercio mundial. Estados Unidos, Japón, Corea del Sur, Alemania, Australia y Brasil, entre otros, son países exportadores hacia la economía china con productos como autos, circuitos integrados, petróleo y oro, y pudieran verse afectados en su nivel de demanda.
A su vez, China exporta a Estados Unidos, Hong Kong, Alemania, Japón, Corea del Sur, México e India, productos como computadoras, equipos de transmisión, productos de telefonía, autopartes, transformadores eléctricos y semiconductores, etcétera, y también pudieran verse afectados.
Pero Europa también viene perdiendo fuerza
También se conocieron datos débiles de países que integran la Zona Euro. Destaca Italia que, por tercer mes, se ubica en zona de contracción, pero también la caída observada en Francia, España y Alemania muestra un enfriamiento claro que al final llevará a un menor crecimiento de la economía.
Además, habrá eventos relevantes en Europa. En Reino Unido, la votación sobre el Brexit, el próximo 14 de enero, que definirá si el tipo de acuerdo con la UE será amigable o brusco. Italia, con riesgos de una recesión y un Gobierno con orientación socialista enfrentará importantes vencimientos de deuda (290 mil millones de euros) y Alemania, que tendrá un cambio de mando con Merkel ya dejando el poder, y podría derivar en una crisis de liderazgo con riesgos de ver quién la sucede en un entorno económico de menor crecimiento.
Entre Estados Unidos, la Zona Euro, Japón (ahora no aporta), China y Reino Unido contribuyen al crecimiento con 63% y casi 77% del valor de capitalización mundial, lo que refuerza señalamientos de que si algo sucede con cualquiera de ellos, el riesgo sobre la economía y los mercados es alto.
Si comparamos el desempeño del índice global económico expuesto en la primera gráfica vs. el índice de renta variable mundial MSCI, vemos que existe una alta correlación de 93.3% y, por lo tanto, el riesgo de ajustes en mercados prevalece.
Índice MSCI global (pts) vs. indicador de economía global (%)