Ella tiene sus razones personales.
No las detalla en público, pero algunos de sus amigos –varios de ellos notarios públicos como ella- son confidentes de su situación.
Aquí va la información:
Olga Sánchez Cordero ya no se siente tranquila como secretaria de Gobernación.
Han pasado muchas cosas.
Hablemos de dos relativas a la gobernabilidad:
El relevo en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no salió a satisfacción de ya saben quién y la responsabilizaron, a su juicio injustamente.
No fue culpable de la crisis en Puebla, pero se le trata de achacar.
Cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirmó el triunfo de Martha Erika Alonso, fue comisionada para ir con la representación de Andrés Manuel López Obrador.
Un día antes se le pidió cancelar el viaje, pese a su relación personal y familiar con el matrimonio Moreno Alonso.
A pesar de ello, Martha Erika Alonso estableció contacto con Olga Sánchez Cordero y fijaron líneas generales para un trato institucional, muy a pesar de López Obrador y el ex candidato Miguel Barbosa.
Eso fue el 23 de diciembre, la víspera del desplome del helicóptero –ojalá algún día se sepa con pruebas si fue accidente- y la muerte de sus amigos Rafael y Martha Erika.
Entonces sí le hicieron efectivo el viaje a Puebla y a ella le tocaron las rechiflas a consecuencia de una campaña de odio en contra de los hoy dos ex gobernadores.
En esa polarización social son mano evidente Miguel Barbosa, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y otros actores instalados en la cúpula de ese partido.
TRANSPARENCIA EN VEREMOS
Mujer de larga vida en la escena pública, tiene ideas propias.
Tal vez algunas no coincidan con el Gobierno en turno, forma eufemística de aludir de manera individual a Andrés Manuel López Obrador.
Extraoficialmente se sabe de su discrepancia cuando se prohibió a todos los miembros del gabinete el uso de vehículos blindados y de guardias, así fueran de contrato privado.
Lo externó al propio López Obrador y le autorizaron las dos cosas: unidad reforzada y elementos de protección.
Ahora están en veremos la transparencia del capital propio y la amenaza de quien no transparente sus bienes no es digno de estar en el Gobierno de la austeridady blablablá.
La ex ministra Olga Sánchez Cordero es de familia de abolengo, primera notaria pública del país desde hace casi 40 años, ha posado en entrevistas en su casa y sus colecciones de arte, y eso la hace vulnerable.
Sus confidentes de la semana pasada aseguran que ella ya anunció su salida a ya saben quién, pero ellos le hicieron una reflexión:
-Si tú te vas, dejas vulnerable a los demás secretarios de Estado y a nosotros mismos, tus colegas.
López Obrador tiene la decisión.
EL CHAPO: TEATRO Y MENTIRAS
Falta mucho para conocer la sentencia a Joaquín el Chapo Guzmán.
Por lo pronto, un testigo de cargo, Jorge Milton Cifuentes, fue una bala perdida porque aseguró haber tenido nexos con Ignacio Morales Lechuga cuando era procurador general de la República.
¡En 1995!
Cuando Morales Lechuga era embajador en Francia, cuyo Gobierno ya hasta lo condecoró.