En por lo menos 10 estados del país, aún sufren de desabasto de combustible.
La falta de gasolina obligó al cierre de 70 gasolineras de las 145 que brindan servicio en Saltillo, Arteaga y Ramos en el estado de Coahuila.
Incluso, el Gobierno de Coahuila y personal de gasolineras pidieron a Pemex abrir el ducto de Cadereyta-Saltillo; el cual se podría encontrar bajo vigilancia de la Policía estatal.
También el desabasto ha afectado el estado de Guanajuato, incluso el gobernador Diego Sinhue afirmó que se encuentra en busca de gasolina por parte de los Estados Unidos.
“Sí se puede porque los concesionarios con los que estoy hablando tienen permiso ya de importación, lo que es aumentar es el volumen, también estamos en contacto con la gente de PMI que es el área de Pemex que importa gasolina, para generar algunos contratos emergentes para poder traer más gasolina. No lo estamos comprando nosotros, lo estaría pagando los gasolineros”.
Existen más de 550 gasolineras en Guanajuato, sin embargo, sólo 84 funcionan.
Según testimonios de los ciudadanos, las filas a la espera de combustible son de varios kilómetros, y tardan más de 12 horas.
En Jalisco, el desabasto de gasolina ronda el 50% y comienza a impactar en las actividades de la vida cotidiana.
También en poblaciones como Ameca, Tala, Lagos de Moreno, Tepatitlán y pueblos mágicos como Chapala, Tequila y Tapalpa; ha sufrido la falta de combustible.
En el estado de Querétaro, de las 296 gasolineras en existencia, sólo el 50% presenta desabasto y 70 se encuentran cerradas.
En el Estado de México, elementos de la Secretaría de Seguridad realizan recorridos en las gasolineras para supervisar la distribución del hidrocarburo.
También, se informó que en instalaciones estratégicas de Pemex, ubicadas en Salamanca y Azcapotzalco, incluso, 19 terminales de almacenamiento y despacho será reforzada la seguridad.
TFA