Durante la celebración eucarística en la Basílica de Guadalupe, el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, pidió orar por las víctimas de la explosión del gasoducto ubicado en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo.
Por su parte, el presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rogelio Cabrera López, a nombre de todos los obispos y sacerdotes del país, se unió al dolor que sufre la comunidad de Tlahuelilpan, la cual pertenece a la diócesis de Tula, así como también lo hizo el obispo monseñor, Juan Pedro Juárez.
“Ofrecemos todas nuestra plegarias y eucaristías, y el consuelo que el señor obispo y sus sacerdotes están ofreciendo, en hospitales y capillas funerarias, a los familiares de todos los afectados por este accidente. Esta situación ha provocado una conmoción en todo el país, por lo que nos unimos a las plegarias, vertidas en lágrimas, de todas las personas que sufren y lloran en este momento”, manifestó Cabrera López.
Asimimo, Carlos Garfias, arzobispo del estado de Morelia, así como sus obispos y toda la Arquidiócesis, expresaron sus condolencias a la Diócesis de Tula por las consecuencias que dejó la explosión del ducto de combustible.
“A todos nuestros hermanos que han salido afectados por el triste hecho pedimos por el eterno descanso de los que perdieron la vida, y expresamos nuestra solidaridad con las personas que están heridas”, dijo.
LEG