Especialistas cuestionaron la compra y operación, por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de más de 500 pipas anunciada por el Gobierno federal, cuyo costo asciende a 85 millones de dólares.
De acuerdo al presidente Andrés Manuel López Obrador, los vehículos serán operados por dicha dependencia dentro del Plan DN-III, pues –dijo– se trata de un asunto de seguridad nacional.
En este sentido, Raymundo Tenorio, analista económico del Tecnológico de Monterrey, criticó la medida, pues precisó que dicho plan solamente se utiliza en caso de desastres o emergencias, y el hecho de que se compren carrotanques para abastecer de gasolina al país, no es una cuestión de esa índole.
“Esta compra no está bien enfocada por parte del Gobierno, ya que hacerlo para abastecer de combustible al país, luego de que fuera una decisión del Ejecutivo cerrar los ductos que transportan el hidrocarburo por cuestiones de logística, no presupone ninguna emergencia”, dijo el experto en una entrevista con 24 HORAS.
Además, afirmó que existe la posibilidad de que los recursos para la adquisición de las pipas salieran del presupuesto asignado al Plan DN-III; “están agarrando dinero de donde quizá no se debería”.
“El dinero para las compras de esas pipas tuvo que haber salido de los ramos administrativos, es decir, del presupuesto asignado a las dependencias del Ejecutivo, por ello ese presupuesto tuvo que haber salido de los entregados al Plan DN-III de la Sedena”, expresó.
También aseveró que la forma en la que se realizó la esta acción “es una clara violación a la Ley de Adquisiciones del Sector Público”, ya que ésta dicta, que en caso de que el Gobierno adquiera bienes de este tipo se debe lanzar una licitación a escala internacional.
En tanto, Salvador Rivas Aceves, secretario académico de la Escuela de Gobierno y Negocios de la Universidad Panamericana, indicó que luego de la adquisición será necesario vigilar que sea el Ejército mexicano, el que use estos autotanques en el futuro.
“Tras esta compra, la ciudadanía debemos estar atentos a que la Sedena use estas pipas no solamente para abastecer de combustible, si no para trasladar agua u otro tipo de productos, ya que solamente deben ser utilizadas para este tipo de cuestiones, porque entrarán en el gasto del Plan (DN-III) que se contempla para desastres naturales, y claramente éste no es uno, aunque si enfrentamos una crisis”, manifestó a este diario.
Plan DN-III
De acuerdo a datos de la Sedena, el Plan DN-III es un programa de auxilio a la población civil en casos de desastres y establece los lineamientos generales a los organismos del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana, para realizar dichas actividades.
LEG