El Papa Francisco aterrizó la tarde del miércoles en Panamá para reunirse con decenas de miles de jóvenes en su primera visita a Centroamérica, una región asolada por la migración forzada, la pobreza y la violencia.
El viaje del primer Papa latinoamericano coincide con la mayor ola migratoria de la región: guatemaltecos, hondureños, nicaragüenses, salvadoreños y venezolanos huyen a diario de la pobreza o violencia en sus países.
Francisco ha defendido la migración desde que asumió como Papa en 2013 y se espera que sea el tema central de su mensaje durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), uno de los principales eventos de la Iglesia católica.
dpc