El año 2018 fue el más violento de las últimas dos décadas al registrarse 28 mil 816 homicidios, el equivalente a 90 muertos por día, y un incremento del 15% respecto al 2017, de acuerdo con la organización Semáforo Delictivo en su reporte anual sobre la incidencia delictiva en el país, quien en palabras de su director, Santiago Roel, los hechos de violencia perpetrados el año pasado dejaron 33 mil víctimas.
En tanto, el año pasado se tuvieron 22 mil 365 ejecuciones que fueron a causa crimen organizado, 20% más en relación al 2017.
De igual forma, se reportó un incremento de homicidios en 24 de los 32 estados de la República; y en el caso de cinco entidades, este delito aumentó, tal es el caso de: Guanajuato (141%); Quintana Roo (113%); Jalisco (47%); Baja California (35%); y Nayarit (32%).
En contraste, las entidades con mayor reducción de homicidios fueron: Baja California Sur (-73%); Sinaloa (-33%); Veracruz (-20%); Durango (-17%) y Colima (-12%).
Los delitos más despuntaron fueron: ejecuciones (22%); homicidios, (15%); feminicidio, (13%); violación, (8%); extorsión (6%); y violencia familiar, (5%). Por el contrario, se registró una disminución en: secuestro (-15%); robo a casa (-8%); lesiones dolosas (-6%) y robo a negocios (-3%).
La organización señaló que la única manera de resolver la violencia en el país es “regulando el mercado de drogas para quitarle el negocio a las mafias”, afirmó su titular.
“La regulación de drogas es la manera correcta de combatir el crimen organizado y la única forma de regresar al ejército a los cuarteles”, resaltó.
Por otro lado, respecto al recorte presupuestal aplicado al INEGI, quien el día de ayer anunció que, debido a este problema no llevará a cabo las encuestas nacionales relacionadas a temas de seguridad, Santiago Roel señaló que es “importante” tener datos que ayuden a entender los problemas en dicha materia.
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