Aunque sabe que el camino hacia el cambio en Venezuela es largo, y que es difícil que la cúpula militar abandone sus privilegios y se arriesguen a ser sometidos a investigaciones, Sorayda no pierde la esperanza en el futuro.
Las imágenes cotidianas que recoge en las calles día a día incluyen a personas buscando comida en la basura y a otras que mueren en los hospitales por falta de medicamentos.
En carne propia ha padecido la represión en su país, pues fue herida por policías en una manifestación hace unos años, y dos de sus tres hijos tuvieron que abandonar la nación.
A pesar de todo, hoy en día la mujer de 52 años tiene esperanza.
Ha sido testigo de otros intentos por derrocar la dictadura de Nicolás Maduro, pero esta vez tiene fe en que se concrete el cambio, de la mano de Juan Guaidó, el presidente de la Asamblea Nacional que hace dos días se autoproclamó en caracas presidente encargado de Venezuela.
“No se había presentado la oportunidad de una persona que nos guiara como nos está guiando este chico, los que lo antecedieron en la Asamblea tienen la mala reputación de haber pactado con el Gobierno, defender sus propios intereses y los partidistas; no habia en el horizonte esta posibilidad. Guaidó está dando la talla”, dijo en entrevista para 24 Horas.
“Estamos esperanzados. Es un muchacho preparado que le tocó vivir este momento de la historia”
LEG