La secretaria de Energía, Rocío Nahle García, afirmó que ante el cierre de ductos de hidrocarburos, sólo ocurrieron algunos retrasos en la distribución del combustible y aseguró que en diciembre pasado se incrementó la importación de gasolina en comparación a enero de 2018.
“Mientras en enero de 2018 se importaron un promedio de 593 mil barriles por día, en el mes pasado de diciembre fueron 601 mil barriles por día, los primeros 10 días de enero de 2019 ya se estaban importando un promedio de 814 mil barriles por día, importaciones tanto de Pemex como de algunas empresas que cuentan con permisos autorizados por la Secretaría de Energía”, precisó.
En reunión de trabajo con la Tercera Comisión de la Permanente del Congreso de la Unión, la funcionaria federal alertó a los legisladores sobre la ruta de crecimiento de las tomas clandestinas de robo de combustible.
Detalló que en 2011 ya se contabilizaban 800 tomas clandestinas; en 2015 eran 6 mil 260 tomas; en 2016, aumentaron a 6 mil 873; en 2017, la cifra creció a 10 mil 363 tomas, y el año pasado cerró la cifra de 14 mil 894.
“Está claro que ante estos números el gobierno de México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, tenía que tomar acciones inmediatas. Por ello es que se implementó esta estrategia”, subrayó.
Advirtió que al cerrar las válvulas en diferentes tramos en los ductos, hubo reportes en ciertas zonas con deficiencias en la distribución y los estados que más problema presentaron fueron Guanajuato, Jalisco y Estado de México.
Por ello, dijo que se incrementó la entrega de manera significativa a través de pipas y carrotanques, tanto de Petróleos Mexicanos (Pemex), como del servicio privado.
Reconoció a la iniciativa privada su colaboración y solidaridad con la estrategia planteada. Pemex movilizó sus casi mil 600 pipas, más de tres mil 400 privadas, así como todos los carrotanques disponibles.
También, continuó, algunas empresas privadas que tienen concesiones y permisos de importación, coadyuvaron para el abastecimiento, expuso.
Nahle García reiteró que hay un más nivel de importaciones de gasolinas, “lamentablemente estamos importando más”.
Apuntó también que tras la reforma energética, la Secretaría de Energía otorgó en el periodo 2015-2018 mil 73 permisos de importación de gasolina.
“Para 2018 había todavía 587 permisos vigentes, sin embargo, sólo se utilizaron 41, es decir, 546 permisos no se utilizaron, por ello también estamos ordenando y revisando el padrón de permisionarios”, puntualizó.
Acompañada por los titulares de Pemex, Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y el titular de la Unidad de Inteligencia, aclaró que hasta ahora la Secretaría de Energía no ha negado ningún permiso que se ha solicitado conforme al cumplimiento de los requisitos establecidos.
Afirmó que a esta fecha operan en México 57 nuevas marcas en 3 mil 677 gasolineras, mientras que Pemex tiene ocho mil 546 estaciones de servicio, pero de estas nuevas gasolineras a más de 90 por ciento Pemex les surte ciertas cantidades de gasolina.
“La empresa del Estado lleva puntual el registro de ventas a esas estaciones, pero estas nuevas estaciones no sólo le pueden comprar a Pemex, también pueden abastecerse de quienes tienen permisos de importación y distribución”, indicó.
“De ahí que la Comisión Reguladora de Energía y la Secretaría de Energía nos estamos dando a la tarea de implementar medidas más rigurosas en el control y seguimiento de los combustibles, desde el barco de descarga cuando se importa, hasta el despacho en la bomba de servicio, así como el otorgamiento de permisos para estaciones de servicios”, subrayó.
Advirtió que se está siendo más rigurosa la investigación o seguimiento de los permisos.
“Sobre los ductos, la Secretaría de Energía tiene registrado decenas de rutas de poliductos de gasolina y diésel de diferentes longitudes, diámetro y capacidad, infraestructura que se construyó en su mayoría en las décadas de los 80 y 90”, agregó.
dpc