Mónaco.- El tenista Novak Djokovic, número uno del mundo, coronó el lunes un regreso ganador a las canchas tras una cirugía al ganar el premio Laureus al deportista masculino del 2018, mientras que la gimnasta Simone Biles se quedó con el galardón entre las mujeres.
El serbio Djokovic, quien hace 12 meses se sometió a una cirugía de codo, ganó Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos en 2018, antes de conquistar el Abierto de Australia en enero para recuperar el primer lugar en la clasificación.
Con su séptima corona en Melbourne Park, una cifra récord, Djokovic superó a Pete Sampras para quedar tercero en la lista de mayores ganadores de títulos del Grand Slam con 15, a dos de Rafael Nadal y a cinco de Roger Federer.
«Pensé en dejar el tenis», dijo Djokovic el lunes. «No me encontraba bien. Me tomó varios meses reencontrarme y recuperar mi centro. Este premio refleja y simboliza este viaje».
Por su parte Biles, que en noviembre se convirtió en la gimnasta con más títulos mundiales con 14 oros, también suma cuatro títulos olímpicos. Además suma cuatro títulos planetarios en la competencia general individual.
El premio a la reaparición del año fue para el golfista estadounidense Tiger Woods, quien silenció incluso a sus críticos más duros cuando obtuvo lo que algunos consideran una de las mayores victorias de su carrera al conquistar el Tour Championship del año pasado, el torneo que cierra la temporada.
Woods, quien ganó el último de sus 14 «majors» en el Abierto de Estados Unidos de 2008, ha tenido muchos contratiempos relacionados con la salud y tuvo que pasar por varias operaciones de rodilla y espalda. En 2017 el final de su carrera parecía inevitable.
La tenista japonesa Naomi Osaka, quien llegó al número uno del mundo tras ganar el Abierto de Estados Unidos el año pasado y el Abierto de Australia en enero, se quedó con el premio a la revelación del año.
MGL