Senadores del PRI, PAN, PRD y MC, abandonaron la reunión de comisiones unidas de Estudios Legislativos y Puntos Constitucionales en el Senado, luego que de Morena y sus aliados, votaran en contra de tener un receso para seguir negociando en el marco de la Junta de Coordinación Política un dictamen consensuado en materia de Guardia Nacional.
Ante ello, Morena y sus aliados votaron el dictamen de la nueva corporación policiaca, aún sabiendo que habrá modificaciones al mismo y con la advertencia de la oposición que de mantenerse como está lo votarán en contra durante su discusión en el Pleno.
El senador del PAN, Julen Rementería pidió un receso para seguir discutiendo, analizando la minuta y así llegar a una propuesta razonable.
En tanto, la priista, Claudia Ruiz Massieu, destacó que ante el avance que se tiene en una mesa de acuerdos, lo más conveniente era hacer un receso para lograr un dictamen con mayor consenso.
“No vale la pena interrumpir el ánimo y forzar la votación de un dictamen”, señaló.
El coordinador de la bancada del PRD, Miguel Ángel Mancera, pidió más tiempo para identificar las coincidencias.
No obstante, los senadores de Morena, negaron el receso y votaron en solitario el dictamen de la Guardia Nacional, a pesar de que su coordinador, Ricardo Monreal, se dijo dispuesto a negociar y hacer las modificaciones necesarias para aprobar con el mayor consenso la nueva corporación policiaca.
Modificaciones realizadas, respecto de la minuta enviada por la Cámara de Diputados
El dictamen aprobado esta tarde en Comisiones del Senado de la República destaca que la Guardia Nacional será una institución meramente de carácter civil, responsable de la salvaguarda de la vida, la libertad, la integridad, el patrimonio de las personas, los bienes y recursos de la Nación.
En los cambios realizados, destaca uno al artículo 21 de la Constitución para fortalecer el carácter civil de Guardia Nacional. Se adicionó también que, entre sus responsabilidades, tendrá “la preservación de la paz pública y el orden”.
Prevé que la estructura orgánica de dirección tendrá una Junta de Jefes de Estado Mayor, compuesta por integrantes de las dependencias de los ramos de Seguridad, Defensa Nacional y Marina.
En tanto, la Defensa Nacional homologará la estructura jerárquica, disciplina, régimen de servicios, ascensos, prestaciones, ingreso, profesionalización. A estas tareas se incluyó la educación y capacitación, como elementos esenciales de las obligaciones de la Guardia Nacional, a los que se aplican en el ámbito de las Fuerzas Armadas.
Plantea que la formación y el desempeño de los integrantes de la Guardia Nacional se regirán por una doctrina policial fundada en la disciplina, el acatamiento de las órdenes superiores y el respeto a los derechos humanos en el ejercicio de sus funciones.
Las comisiones dictaminadoras consideraron facultar al Congreso de la Unión para expedir las leyes sobre la organización, disciplina y profesionalización de la Guardia Nacional; la ley para el uso legítimo de la fuerza garantizando el respeto de los derechos humanos. Además, se suprimió de la minuta la creación de la Ley General del Registro de Detenidos.
Se ampliaron las atribuciones del Senado de la República para que analice el informe anual que el Presidente de la República presente sobre las actividades de la Guardia Nacional. Se elimina la atribución de la Comisión Permanente para prestar su consentimiento para el uso de este cuerpo de seguridad.
Asimismo, plantea facultar al Presidente de la República para disponer de la Guardia Nacional para la seguridad pública, la protección civil y en casos de urgencia, para preservar seguridad nacional, seguridad interior y defensa del exterior de la Federación. Lo anterior a diferencia del texto propuesto en la minuta de la colegisladora, la cual derogaba esta facultad.
En los transitorios se estableció que el Congreso de la Unión expedirá la Ley de Guardia Nacional dentro de los 90 días siguientes de la entrada en vigor del Decreto.
Se añadió, también, que la Guardia Nacional se constituirá con los elementos de la Policía Federal, la Policía Militar y la Policía Naval mediante acuerdos de carácter general que determine el Presidente de la República.
La Guardia Nacional asumirá las funciones previstas en la Ley de la Policía Federal con la gradualidad que se requiera para asegurar la continuidad de operaciones y la transferencia de recursos humanos, materiales y financieros que correspondan.
De igual forma, se aprobó que el Ejecutivo Federal disponga de lo necesario para la incorporación de los elementos de las policías Militar y Naval a la Guardia Nacional y designe a los integrantes de los órganos de dirección superior de dicha corporación.
Se establece que, los elementos de las policías Militar y Naval, así como otros de la Fuerza Armada permanente asignados a la Guardia Nacional conservarán su rango y prestaciones, la ley garantizará que cuando un elemento sea reasignado a su cuerpo de origen respetarán los derechos con que contaba al momento de ser asignado, así como el reconocimiento del tiempo de servicio para efectos de antigüedad.
Las comisiones dictaminadoras precisaron que la colaboración de las Fuerzas Armadas en materia de seguridad pública seguirá, hasta en tanto no se integre la Guardia Nacional.
JMSJ