La semana pasada en la región de Bay, Área de California en Estados Unidos, azotaron fuertes rachas de viento, inundaciones y nevadas que cubrieron de blanco el panorama, esto debido a un fenómeno climático extremo al que los científicos denominan ‘río atmosférico’.
Los científicos calificaron este fenómeno como ‘Tormenta ARk’, acrónimo de Atmospheric River 1000, en referencia al hipotético terremoto que se espera sacuda a todas las ciudades situadas cerca de la falla de San Andrés.
Dicho fenómeno se presenta como una columna de vapor que se libera en forma de lluvia o nieve al tocar tierra y suele ser devastador para los poblados cercanos en donde se forma. Así sucedió en California, donde dejó a su paso árboles caídos, apagones, carreteras inundadas y al menos seis personas muertas.
Hasta el momento, se espera que un tercer ‘río’ azote California, el cual sería catastrófico ya que duraría algunas semanas dejando graves inundaciones a su paso y condados como Orange, Los Angeles y San Diego quedarían completamente bajo el agua.
Los vientos fuertes también serían un grave problema, ya que facilitarían deslaves que dañarían viviendas, autos, agricultura e infraestructura; situación que implicaría gastos exorbitantes y pérdidas humanas.
El sistema de drenaje, energía y agua potable también se verían afectados por lo que miles de residentes tendrían que ser desalojados de sus viviendas.
DJOR