Autoridades de Medellín derribaron, mediante una detonación controlada, el edifico Mónaco, antiguo fortín del fallecido capo de la droga PabloEscobar,ubicado en la zona exclusiva de Santa María de los Ángeles.
La demolición se realizó a las 11:53 horas con el sonido de una alarma y luego un estruendo que definió el final de la antigua morada del líder del cartel de Medellín.
“Hoy Medellín abraza su historia. Hoy Medellín construye un nuevo relato. Hoy cae un símbolo para encender la esperanza. Hoy nace un nuevo símbolo para darle luz a la oscuridad”, dijo a periodistas el alcalde, Federico Gutiérrez, antes de la implosión.
Así derribamos el edificio Mónaco, un símbolo de la ilegalidad que durante años estuvo en ruinas. Comenzamos a contar la historia del lado de las víctimas. Hoy #MedellínAbrazaSuHistoria. pic.twitter.com/qONUKhYHxR
— Alcaldía de Medellín (@AlcaldiadeMed) 22 de febrero de 2019
Los pobladores del barrio Santa María de los Ángeles no sólo han presenciado el abandono de la edificación, sino también han padecido que se convirtiera en destino obligado de los llamados “narcotours”.
Previamente el secretario de la alcaldía de Medellín, Manuel Villa afirmó “no podemos desconocer la historia, pero sí podemos darles espacio a otros protagonistas de esa historia”.
“Que la gente conozca que vivimos tiempos hasta con 10 bombas en un solo mes. Que en los últimos tres meses de 1989 el país sufrió 100 atentados con bombas. No se pueden desconocer casi 50 mil muertes de 1983 a 1994”, dijo.
Algunos sectores proponían conservar el Mónaco, o bien renovarlo y convertirlo en museo, pero el alcalde Federico Gutiérrez sostuvo que la demolición “es lo que han pedido los vecinos que padecieron la llegada de turistas que visitaban este lugar para mirarlo con morbo”.
Según el diario El Tiempo, readecuar la estructura e instalar un museo costaría entre 40 mil y 50 mil millones de pesos, mientras que su derrumbe requeriría dos mil 600 millones, y otros seis mil millones construir allí un memorial, para el cual se tiene un diseño denominado “Inflexión”, que estaría listo para noviembre.
El Mónaco ocupaba un área de unos cinco mil metros cuadrados, fue construida en 1986 y Pablo Escobar vivió alli pocos años con su familia, y desde este lugar se habría desatado la guerra entre los cárteles de Medellín y Cali en enero de 1988, por un atentado con un auto bomba que estalló en la entrada del edificio.
Un año después del atentado, el edificio fue sede de la Asociación Cristiana de Asistencia y Rehabilitación (Asocar). En 1997, la entonces Dirección Nacional de Estupefacientes lo cedió a Carisma, entidad dedicada al tratamiento y rehabilitación de adictos a sustancia psicoactivas, que estuvo ahí dos años.
Después el Mónaco fue destinado a la Seccional Administrativa y Financiera de la Fiscalía, y en febrero de 2000 fue blanco de otro atentado con explosivos.
En 2008 la propiedad fue entregada a la Policía Nacional, sin que se pudieran concretar planes para instalar oficinas en el lugar, que en abril del 2018 pasó a manos de la alcaldía de Medellín, gracias a que la Sociedad de Activos Especiales (SAE) permitió intercambiar el inmueble por otro. (Con información de Notimex)
JMSJ