La maquinaria está en plena marcha.
Salvo sorpresa, porque no se ve cómo Ricardo Monreal venza a Yeidckol Polevnsky y menos a Andrés Manuel López Obrador, la contienda en Puebla ya está muy encaminada.
Aquí hemos dado algunos avances.
La pretensión es hacer candidato una vez más a Miguel Barbosa, perdedor de Morena ante la panista accidentada Martha Erika Alonso.
Como desconoció su derrota, rechazó la victoria de la esposa de Rafael Moreno Valle y polarizó a los poblanos, se le arropa desde dentro y fuera del nuevo partido de Estado para reducir los costos políticos.
Lo primero es alejarle de la contienda al senador Alejandro Armenta, puntero en varios sondeos internos y favorito de Monreal, con señalamientos de priista y por lo tanto no confiable.
El segundo paso es poner un político cercano al morenovallismo, Fernando Manzanilla, como brazo derecho de Barbosa en campaña y en el Gobierno para allegarle votos de los ex gobernadores.
Pero no es todo.
LA NOMENKLATURA OFRECE A URZÚA
Otras acciones avanzan en forma paralela a favor de Miguel Barbosa.
De momento se ha parado la promesa de Andrés Manuel López Obrador de incorporarlo a una posición federal, en espera de terminar las negociaciones en Puebla.
Además, se ha tomado en cuenta su débil estado de salud y quizá no esté para responsabilidades a desarrollar en todo México, de Norte a Sur y de frontera a frontera.
El arropamiento incluye, por supuesto, a otras fuerzas políticas.
Una operación similar a la extraña alianza de Morena con el PRI para quitar el interinato al PAN.
Se sacó del sarcófago político al priista Guillermo Pacheco Pulido, y de esa manera se debilitaron más las posibilidades panistas de retener Palacio de Gobierno en las elecciones extraordinarias.
Y si el Gobierno federal y Morena ya tienen en Pacheco Pulido a un aliado, ahora se ha arrancado el compromiso a la nomenklatura priista de levantar el brazo a Barbosa el 2 de junio próximo por la noche.
¿Cómo?
Con un candidato afín del PRI.
Y el escogido es… ¡Ricardo Urzúa!
Sólo falta convencer a Enrique Dóger de no hacer olas y ocultar su aspiración, según cree, de hacer “un dignísimo papel” como segundo lugar en las próximas elecciones extraordinarias.
Así se piensa dar la gubernatura a Morena y enterrar al PAN.
LA GUARDIA Y EL CAPÍTULO PENDIENTE
1. Todavía faltan varios pasos para la vigencia y operación de la Guardia Nacional.
La pelea pendiente la veremos cuando un duro, tamaño Miguel Ángel Osorio Chong -¿quién le puede negar su participación hasta ayer?-, discuta la ley orgánica, los protocolos y otros aspectos fundamentales.
2. Aquí dimos un avance desde enero: el Grupo Televisa de Emilio Azcárraga Jean cerraría 2018 con números muy optimistas.
Ayer los dio a conocer: las ventas netas consolidadas y la utilidad de los segmentos operativos crecieron 8.2 y 8.5%, respectivamente.
Mientras, las de publicidad aumentaron 2.1% y el segmento operativo de operación del mercado masivo de cable alcanzó doble dígito, 11 puntos.
3. ¿En qué pensaría el diputado Enrique Ochoa durante el World Championship de Golf?
El ex dirigente del PRI andaba en bermudas, solo.