HANÓI.- Unos 200 agentes del servicio secreto de Estados Unidos comenzaron a llegar a Hanoi, capital de Vietnam, previo a la segunda cumbre entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, prevista para el 27 y 28 de febrero.

 

Una parte de los agentes llegó en dos aviones militares que partieron desde una base estadunidense en Japón y aterrizaron en el Aeropuerto Internacional Noi Bai de la capital vietnamita, y el resto lo hará a lo largo del día.

 

Un Boeing C-17 Globemaster III transportó este sábado dos automóviles presidenciales llamados Cadillac One, así como dos camionetas Chevrolet Suburban y varias docenas de miembros del equipo de escolta del presidente Trump, reportó el sitio vietnamita VN Express.

 

Cadillac One, apodado como “La Bestia”, está diseñado para soportar granadas y armas bioquímicas. Además, el vehículo de la guardia presidencial también cuenta con un sistema de asistencia de conducción nocturna y una red inalámbrica privada para proteger el auto.

 

Desde la madrugada, las fuerzas de la policía de tránsito vietnamita estaban en guardia en el aeropuerto, listas para conducir el convoy estadounidense hacia el centro de la ciudad, donde Trump tiene previsto reunirse con el líder norcoreano Kim Jong-un la próxima semana.

 

El enviado especial estadounidense Stephen Biegun llegó a Hanoi el pasado jueves, un día después que su homólogo norcoreano, Kim Hyok-chol, para preparar la histórica cumbre en la que se abordará la desnuclearización de la península de Corea.

 

Antes de la cumbre, está previsto que el líder norcoreano inicie el lunes una visita de Estado de dos días a Vietnam, en la que se reunirá con el presidente y secretario general del Partido Comunista vietnamita, Nguyen Phu Trong, en el palacio presidencial de Hanoi, reportó por su parte la agencia vietnamita VNA.

 

En junio de 2018, Trump y Kim acordaron en su primera cumbre en Singapur la desnucelarización de Corea del Norte, pero la falta de una hoja de ruta ha provocado que se hayan producido pocos avances.

 

Washington exige a Pyonyang pasos concretos hacia el desmantelamiento de las armas nucleares, mientras que el régimen norcoreano pide que antes se firme un tratado de paz que le brinde garantías de seguridad y se aligeren las sanciones económicas que pesan sobre él, temas que se espera que Trump y Kim aborden en su nuevo encuentro.

 

Pyonyang y Washington permanecen técnicamente enfrentados desde la Guerra de Corea (1950-1953), que finalizó con un alto al fuego suscrito por Corea del Norte, el llamado Ejército de Voluntarios chino y Estados Unidos (que lo firmó en representación del Comando de Naciones Unidas) y que nunca fue sustituido por un tratado de paz.

dpc