La primera ministra Theresa May prometió el domingo ofrecer a los legisladores británicos una votación sobre su acuerdo del Brexit antes del 12 de marzo, en su último intento por obtener la aprobación de un plan que garantice una salida ordenada de Reino Unido de la Unión Europea.
A medida que la laberíntica crisis del Brexit se intensifica, May está haciendo un último esfuerzo para negociar cambios en el paquete de divorcio, aunque los legisladores británicos podrían intentar el miércoles tomar el control del proceso de salida con una serie de votaciones parlamentarias.
El Parlamento británico votó en enero 432-202 en contra del acuerdo de May, en la peor derrota parlamentaria en la historia británica moderna, lo que llevó a la primera ministra a buscar cambios que permitan que los legisladores ratifiquen el acuerdo y eviten una salida potencialmente caótica.
En su camino a Egipto para participar en una cumbre de la Unión Europea y la Liga Árabe, May dijo que otras reuniones en Bruselas para garantizar cambios en el acuerdo habían descartado el llamado “voto significativo” en el Parlamento la próxima semana. En cambio, aseguró que la votación será ante del 12 de marzo, solo 17 días antes de que Reino Unido deba salir del bloque.
“Todavía está a nuestro alcance dejar la Unión Europea con un acuerdo el 29 de marzo y eso es para lo que estamos trabajando”, dijo May mientras se trasladaba a Egipto.
En Sharm El-Sheikh, May buscará ganar el respaldo de los líderes de la UE para asegurar los cambios y aliviar la creciente frustración en Europa por el impás político generado por el acuerdo pactado con Londres en noviembre.
La UE ha descartado reabrir el acuerdo de salida, aunque ambas partes están considerando un posible apéndice legal para tranquilizar a los legisladores que temen que la salvaguarda para la frontera irlandesa pueda mantener a Reino Unido atrapado en la órbita de la UE en los próximos años.
“Hemos tenido buenos progresos y discusiones constructivas con la Unión Europea”, dijo May, que agregó que los negociadores británicos volverán a Bruselas el martes.
Sin embargo, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, expresó su cansancio con la situación actual.
“Necesitas dos para bailar tango, y yo sé cómo bailar”, dijo Juncker. “Tengo cierto cansancio sobre el Brexit”.
En una carrera contrarreloj hasta el 29 de marzo, Londres se encuentra inserto en su crisis política más profunda en medio siglo, mientras lidia cómo salir del proyecto europeo al que se unió en 1973.
Algunos legisladores intentarán que el Parlamento tome el control del proceso del Brexit mediante una serie de votaciones parlamentarias el 27 de febrero, aunque intentos similares han fracasado previamente.
TFA