El presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó ayer un decreto sobre la suspensión por parte de Rusia del Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio (INF, por sus siglas en inglés), a un mes de que Estados Unidos inició el proceso para retirarse del mismo acuerdo, suscrito en 1987.
La decisión responde a la necesidad de tomar medidas inmediatas en relación con la “violación por parte de Estados Unidos de sus obligaciones” contraídas en virtud del Tratado, informó el servicio de prensa del Kremlin, en un comunicado difundido por la agencia de noticias Sputnik.
Según el decreto presidencial, el tratado queda suspendido hasta que Estados Unidos “ponga fin a las violaciones de sus obligaciones en virtud del acuerdo, o hasta la expiración del mismo”.
El pasado 2 de febrero, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la suspensión de sus obligaciones con el tratado e inició el proceso para retirarse del pacto, que se completará en seis meses y del que sólo se retractará si percibe que Moscú vuelve a cumplir con los términos.
Estados Unidos y Rusia se acusan de manera mutua de violar el tratado INF, que constituye la piedra angular de la seguridad en Europa.
Firmado en 1987 por los entonces presidentes Ronald Reagan y Mijail Gorbachov, el Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio fue el primer acuerdo de reducción nuclear soviético-estadounidense que obligaba a ambas naciones a eliminar sus misiles balísticos y de crucero nuclear o convencional.
El tratado, que prohíbe la fabricación y uso de misiles balísticos terrestres había puesto fin a la crisis desatada en la década de 1980 por el despliegue de los SS-20 soviéticos con ojivas nucleares, que apuntaban a Occidente.
LEG