El caso de José Antonio Yépez Ortiz alias el Marro puede ser tomado como un ejemplo tipo que permitiría establecer la formación de una nueva generación de capos del crimen organizado. Y como ocurrió con los jefes de las bandas del narcotráfico, su origen tiene que ver con el Estado, el Gobierno, la política y el poder.
Los delincuentes se hacen, no nacen. El Chapo se consolidó con la compra de lealtades de funcionarios, políticos, jueces y custodios. El Marro siempre estuvo ahí, contó con el apoyo de autoridades estatales y municipales panistas y priistas, el huachicoleo en Guanajuato siempre se denunció, el control total sobre un municipio en nada difiere del modelo del Cártel Jalisco, de Los Zetas, de las demás bandas, del Chapo, de Osiel Cárdenas.
Sin el apoyo del poder político no habría bandas criminales poderosas. Las bandas crecieron con el apoyo oficial y luego se pusieron encima de esa estructura del Estado en sus tres niveles.
¿Dónde estuvo la inteligencia del Estado y ahora la inteligencia criminal del Centro Nacional de Inteligencia (ex CISEN)?, ¿quién hizo las evaluaciones regionales?, ¿dónde está el mapa de riesgos del CISEN-CNI sobre el huachicoleo? El presidente López Obrador se lanzó contra los huachicoleros sin tener apoyo de la inteligencia oficial.
De repente apareció el Marro: ¿hay más como él, saben quiénes son, cuántos otros hay, dónde, cómo se consolidaron, qué responsabilidades tuvieron Pemex y los tres niveles de Gobierno? Porque de repente ni los hongos.
El tema es central porque tiene que ver no con notas policiacas, sino con la percepción en tiempo real de la existencia de estructuras criminales que han ocupado espacios políticos y territoriales de la soberanía del Estado. Se trata, el del Marro de un asunto de seguridad del Estado que alguien debe atender en tanto que se forma la Guardia.
¿Cuál es el mapa de bandas criminales en todos sus niveles en el país? Sin este mapa, la Guardia será ineficaz.
Zona Zero
Primero Puebla y ahora Guanajuato -y otras partes de la República que saldrán pronto- como zonas del nuevo delito del huachicoleo. Y falta la revelación de las estructuras de apoyo, transporte, ventas al menudeo, compra de pueblos enteros y corrupción gubernamental. Y sólo persiguen al Marro.