LONDRES.- El gobierno británico pactó con la Unión Europea (UE) “cambios legalmente vinculantes” al acuerdo para la salida de Londres del bloque, el llamado Brexit, en una reunión entre la primera ministra Theresa May y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en Estrasburgo.
En una conferencia de prensa conjunta después de las conversaciones, la primera ministra dijo que se han asegurado cambios “legalmente vinculantes” en el acuerdo sobre el Brexit, un día antes de que los parlamentarios británicos voten el texto, informó la cadena BBC.
En vísperas de la primera fecha crucial para culminar el proceso de salida, Juncker advirtió que si el parlamento británico rechaza el acuerdo, no habrá “una tercera oportunidad”.
En Londres, el ministro de la Oficina del Gabinete, David Lidington, anunció los cambios ante la Cámara de los Comunes, y aseguró que significarían que la UE “no puede intentar atrapar al Reino Unido en la salvaguarda (irlandesa) de manera indefinida”.
El mecanismo de salvaguarda sobre Irlanda se refiere al estatus que tendrá la frontera entre Irlanda, Estado perteneciente a la UE, y el territorio británico de Irlanda del Norte.
El político laborista Keir Starmer, considerado el encargado de la oposición para los temas del Brexit, preguntó a Lidington si se habían realizado cambios en el acuerdo de retiro, y adelantó que “la gente se sentirá decepcionada cuando vea los detalles”.
May viajó este lunes a última hora a Estrasburgo, sede del Parlamento Europeo, con el secretario del gabinete para el Brexit, Steve Barclay, para estas conversaciones finales antes de que los parlamentarios voten sobre el acuerdo este martes.
En las conversaciones con Juncker y el negociador principal de la UE para el Brexit, Michel Barnier, las partes acordaron dos documentos, lo que según Lidington “fortalecería y mejoraría” tanto el acuerdo de retiro de la UE como la declaración política sobre la futura relación.
El primero es un “instrumento legalmente vinculante” sobre el acuerdo de retiro, que según May, podría usarse para iniciar una “disputa formal” contra la UE si intentara mantener al Reino Unido atado a la salvaguarda para mantener una frontera abierta en Irlanda por tiempo indefinido.
El segundo es una “declaración conjunta” que se suma a la declaración política para comprometerse a reemplazar la salvaguarda con arreglos alternativos para diciembre de 2020.
“Los parlamentarios tenían claro que los cambios legales eran necesarios para el respaldo. Hoy hemos asegurado cambios legales”, dijo May, quien concluyó: “ahora es el momento de unirnos para respaldar este trato mejorado con Brexit y cumplir con las instrucciones del pueblo británico”.
MGL