La FIFA y Qatar saben que tienen desafíos por delante y obstáculos para expandir la edición 2022 del torneo de 32 a 48 selecciones, pero ninguna de las partes está dispuesta a retirar la propuesta de la mesa, al menos por ahora.
La reunión del viernes del Consejo de la FIFA decidió que las partes “seguirán explorando juntas esta posibilidad y analizarán si pueden formular una propuesta de ampliación conjunta que cumpla con todos los requisitos necesarios y presentarla ante el Consejo y el Congreso de la FIFA en junio”.
“En caso de que se presente tal propuesta, la votación sobre la decisión definitiva tendrá lugar en el 69º Congreso de la FIFA, que se celebrará el 5 de junio en París. Hasta entonces, siguen su curso los preparativos para un Mundial de 32 selecciones en Qatar”, agregó la entidad. O como dijo el presidente de la FIFA, Gianni Infantino: “Si se da, fantástico. Y si no, también”.
Los obstáculos son numerosos: agregar otros 16 equipos requeriría más partidos y sedes adicionales. Y, de acuerdo con el estudio de factibilidad de la FIFA, no sería posible solo en Qatar.
El problema es que algunos de los socios naturales para una sede conjunta no participarán de esta propuesta debido a una profunda división política y económica en la región.
En junio de 2017, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Bahréin y Egipto cortaron los lazos políticos, comerciales y de transporte con Qatar por acusaciones de apoyar el terrorismo, algo que ese país niega.
La FIFA sostiene que el bloqueo tendría que levantarse antes de que haya posibilidades de que esos países alberguen juegos. Eso deja a Omán y Kuwait como socios potenciales, aunque ninguno tiene estadios para organizar un Mundial.
En cualquier caso, la Copa del Mundo tendrá 48 equipos en la edición 2026 que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá.
jhs