Para que México llegue al anhelado crecimiento del 4% del PIB y el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador concrete su nueva política social, se requiere una nueva reforma fiscal para recaudar más impuestos a empresas, dijo Ricardo Martner, quien fuera jefe de la Unidad de Asuntos Fiscales de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).
“El Plan Nacional de Desarrollo (PND) requiere una gran movilización de recursos, llevo 30 años viendo temas de planificación en América Latina y en general fracasan por falta de recursos”, indicó el experto.
En conferencia, Martner dijo que México es el país con menor recaudación de impuestos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), pues recauda apenas el 16.2% del PIB (menos de la mitad del promedio del organismo), y cobra menos impuestos a las empresas.
Señaló que la evasión fiscal género pérdidas por al menos 6.7% del PIB para los estados de América Latina en 2015 (equivalente a 340 mil millones de dólares), y que los organismos tributarios sufren “grandes presiones”.
El experto de la Comisión Independiente para la Reforma Internacional de la Fiscalización Corporativa (ICRICT, por sus siglas en inglés) mencionó que ante el hecho de que el 10% del PIB se esconde en paraísos fiscales y el 40% de utilidades de empresas multinacionales se traslada a estas “guaridas”, se deben llevar cuatro acciones para dirigirse a un nuevo orden tributario mundial: una Tributación unitaria global designada por una entidad autónoma; asignar una tasa corporativa efectiva mínima de 20 y 25%; un registro común de beneficiarios e informes públicos de actividades de multinacionales y la creación de una Entidad Tributaria Mundial.
LEG