La amenaza que pesa sobre la preservación de la vaquita marina ha llevado a niveles críticos su población: se tiene un registro visual de sólo seis vaquitas, y consensados -de manera acústica- 22 ejemplares, advirtió Andrew Rhodes, comisionado nacional de Áreas Naturales Protegidas.
En dicho contexto, y como un esfuerzo por preservar la especie en el Alto Golfo de California, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), en colaboración con diversas organizaciones civiles, presentaron ayer un plan de sustentabilidad pesquera que contempla el cuidado de dicha especie.
Basado en cinco ejes, el proyecto abarca acciones de desarrollo integral para generar bienestar comunitario, así como gobernanza y seguridad; pesca sustentable y responsable; la conservación de ecosistemas y la diversificación productiva.
De cada eje se desprenden acciones concretas que deberán ejecutarse en corresponsabilidad con los habitantes del norte del Golfo de California, los Gobiernos estatales y el Gobierno federal.
Al aplicar la estrategia, se espera que el cetáceo tenga un entorno amigable para su reproducción.
El plan implica también combatir la pesca furtiva e ilegal de la especie, así como del pez totoaba.
Para estimar la distribución y tamaño de la población de la vaquita marina se continuará con el monitoreo acústico.
En 1990 se firmó el decreto de Reserva de la Biósfera, en el cual se estipulaban, aproximadamente, de 500 a mil vaquitas marinas en México. Sin embargo, para 2005 se presentó una caída de 8.4%, por año, de especies;en tanto que, de 2010 a 2015, se apreció una disminución de 18.5% de ejemplares al año.
El anuncio se hizo ayer en el marco de la presentación de la Iniciativa para la Sustentabilidad en el Norte del Golfo de California. Los titulares de la Semarnat, Josefa González Blanco Ortiz Mena; y de la Sader, Víctor Villalobos Arámbula, firmaron el convenio marco de colaboración general y trabajo coordinado entre ambas dependencias.
LEG