Foto: Reuters La tercera derrota del acuerdo de divorcio de May dejó a la debilitada líder sumida en una peligrosa crisis  

El Parlamento británico intentará el lunes recuperar de nuevo el control sobre la salida del país de la Unión Europea, en una sesión en la que algunos legisladores esperan poder obligar a que la primera ministra, Theresa May, abandone su estrategia de Brexit y busque lazos económicos más estrechos con el bloque.

 

El acuerdo de May, que ha sido rechazado tres veces por los parlamentarios incluso a pesar de que prometió que dimitiría si era aprobado, se vio aún más debilitado cuando el jefe de su propia bancada conservadora en el Parlamento dijo que es inevitable un Brexit más suave.

 

Tres días después de la fecha en que Reino Unido debía haber abandonado la UE, sigue habiendo incertidumbre sobre cómo, cuando o, incluso, si se culminará algún día el adiós al bloque al que se integró hace 46 años. La tercera derrota del acuerdo de divorcio de May dejó a la debilitada líder sumida en una peligrosa crisis.

 

El Parlamento votará varias opciones de Brexit el lunes, que podrían mostrar que una mayoría apoya una unión aduanera. Por su parte, May podría intentar llevar de vuelta su acuerdo para que sea votado en el Parlamento el miércoles.

 

El gobierno de May y su partido, que lleva 30 años enfrentados a un cisma sobre Europa, estaban en una pugna abierta entre los que defienden una unión aduanera con la UE y los euroescépticos, que exigen una ruptura total con el bloque.

 

El presidente del grupo parlamentario conservador dijo que el gobierno debería haber sido claro al indicar que era inevitable un Brexit más suave después de perder su mayoría en las elecciones de 2017.

 

“El gobierno en su totalidad debería haber sido probablemente más claro sobre las consecuencias”, comentó Julian Smith a la BBC en una entrevista publicada el lunes. “La aritmética parlamentaria significaría que esto generaría inevitablemente un tipo de Brexit más suave”, afirmó, agregando que los ministros intentaron minar a May.

 

Su comportamiento, dijo, fue “el peor ejemplo de mala disciplina en un gabinete en la historia política británica”.

 

Al ser preguntado sobre sus comentarios, el portavoz de May dijo: “La primera ministra dejó claro que es necesario que el país vuelva a unirse tras la votación de Brexit y eso es lo que ellos (el gobierno) está intentando lograr”.

 

Por su parte, los funcionarios europeos hicieron una petición desde Bruselas: por favor, decídanse.

 

“Una esfinge es un libro abierto comparado con Reino Unido”, afirmó el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. “Nadie sabe hacia dónde van. Me gustaría poder hacer hablar a la esfinge, para que nos diga a qué dirección le gustaría ir”.

 

TFA